LOS ANGELES. AP. Luis Sojo es un hombre feliz y es difícil culparlo: su equipo venezolano está invicto en sus cinco últimos partidos, ganó todos sus desafíos en la segunda ronda, y se instaló como líder de su grupo en las semifinales del Clásico Mundial de Béisbol.

Además, por fin, los venezolanos podrán olvidar el 2006, cuando su presentación en la primera edición del Clásico fue un rotundo fracaso que terminó en una eliminación en la segunda fase.

Venezuela consiguió el liderato de su llave, y por lo tanto el derecho a jugar el sábado en la primera semifinal en Los Angeles, al superar el miércoles por 10-6 a Estados Unidos en Miami.

Todo le está saliendo bien a Venezuela (6-1) en el momento apropiado, desde el pitcheo abridor y el relevo, hasta los batazos de poder y los hits oportunos.

La «vinotinto» consiguió triunfos de todo tipo en la segunda ronda, comenzando por el 3-1 sobre Holanda -en el que apenas logró tres hits, pero dos fueron jonrones- seguido por el 2-0 sobre Puerto Rico con una joya monticular de Félix Hernández, y la paliza contra Estados Unidos con una detonación en el plato.

Estamos muy motivados

Este equipo está haciendo las cosas pequeñas para ganar los partidos», comentó Sojo, quien también dirigió la novena venezolana que fue eliminada en la segunda ronda del Clásico pasado.

«Desde que este Clásico comenzó se ha visto que hay una estrella diferente en cada partido», señaló el dirigente.

«Todos los muchachos están enfocados. Todos quieren ayudar en lo que estamos buscando, que es ganar el campeonato».