En tiempos navideños todo el mundo quiere comprar ropa nueva o darle nuevos aires a su hogar, pero debido a la crisis económica, que casi siempre afecta a la clase media y baja, muchos recurren a la compra de artículos de segunda mano como una alternativa, debido a los precios asequibles.

Pese a las ofertas de las tiendas, Rosa Delia Serrano se declara fiel a la compra de ropa en pacas. “Es más calidad por menos precio. Yo aquí encuentro ropa de marca por 10 pesos y con una lavada se ven como nuevas, mientras que en las tiendas uno da 300 pesos por un suéter y a la primera lavada se destiñe”, asegura la señora, sin detenerse en la búsqueda de la ropa que sus hijos vestirán el 24 y 25 de diciembre.
Mientras, Ana Mejía, madre de tres hijos que reside en Villas Agrícolas dice que de vez en cuando compra en las tiendas tradicionales, pero que en las de segunda mano siempre ha valorado la calidad y el precio de la ropa que compra.

Artículos del hogar. Ya sea por cuestión de viajes o remodelación, son muchas las personas que venden artículos del hogar a mitad de precio o con costos más económicos.

Esta oportunidad la aprovechan muchos para adquirir electrodomésticos o muebles que necesitan para su hogar.

De hecho, hay páginas de Internet como quebarato e Emarket donde las personas publican los artículos y desde ahí establecen contacto con posibles compradores.

Sin embargo, esta modalidad de intercambio comercial, al tiempo que ha significado una ventaja para muchos también ha sido un dolor de cabeza para otros.

A través de las redes sociales, varias personas han denunciado que fueron estafados por compradores, que les pagan el artículo adquirido con un cheque y cuando iban a cambiarlo no tenía fondos.

Cautela. Debido a estos casos, los ciudadanos que valoran positivamente la venta de artículos usados por Internet son más cautelosos a la hora de recibir el pago y uso del punto de encuentro con los clientes.