Los zumos comerciales son nutricionalmente muy inferiores al zumo fresco que uno mismo puede obtener exprimiendo la fruta, pero aún así existen notables diferencias entre el uno y la otra.
La naranja es un alimento rico en vitaminas, sales minerales y azúcares, y todos estos nutrientes brindan saludables beneficios para la salud. Sin embargo, las propiedades nutricionales, la cantidad de alimento que se consume y la saciedad, entre otros aspectos, no son las mismas si se toma de una forma u otra.
Una naranja de mesa puede pesar alrededor de los 200 gramos y, una vez pelada, unos 150 gramos son comestibles. Sin embargo, con 2 naranjas de zumo, se puede obtener un vaso de 200 mililitros.
Las naranjas frescas son bajas en calorías y una buena fuente de fibra y potasio.
Las naranjas tienen efecto laxante, debido a su celulosa y desinfectantes del intestino por su ácido cítrico, de ahí su insustituible utilidad en las enfermedades febriles de origen intestinal.
Las naranjas (y otros frutos relacionados) son una fuente primaria de betacriptoxantina en la dieta. La betacriptoxantina es un carotenoide no provitamina A con propiedades antioxidantes.