Julio Gómez 
A pesar de los pronósticos devastadores por el huracán Beryl, que pasó por República Dominicana siendo categoría 5, la provincia de Pedernales no fue afectada por lluvias importantes.
Sin embargo, un ventarrón seco que se produjo en horas de la tarde ayer martes por aproximadamente quince segundos, derribó el techo completo de una vivienda y la copa de un árbol.
De acuerdo a moradores, la situación no pasó de un susto, debido al estruendoso impacto y a que el zinc y madera cayeron sobre los transformadores de electricidad de una sucursal del Banreservas.
La actuación rápida de los bomberos, Defensa Civil, Edesur, miembros del Ejército, Medio Ambiente, policías, voluntarios y Cruz Roja dejaron el problema resuelto.
Actualmente el panorama en Pedernales es de total calma, mientras que en horas de la mañana de este miércoles las autoridades enfocan su atención hacia los barrios vulnerables como Los Robles, Los Guayacanes, Los Altagracianos, Los Cayucos y otros, donde orientan y advirtieron a lugareños para retirar los refugios y albergues ante el paso del peligro.
Según explicó la gobernadora Altagracia Brea de González y el director de la Defensa Civil, Fernelis Dotel, apenas unas cuatro familias voluntariamente pasaron a los albergues, quienes ahora serán trasladas a sus hogares de origen.
Entretanto, Brea de González aseguró que quedará resuelto la reinstalación del techo de la vivienda afectada por el ventarrón.
De igual forma, durante este día las autoridades han estado dando asistencia con alimentos cocidos autorizado por el director de los Comedores Económicos, Edgar Augusto Feliz Matos, quien tiene el puntero puesto para Pedernales y Barahona.
El poderoso huracán que ya es de categoría 4, se encuentra fuera de las costas de Pedernales, pero las autoridades se mantienen alerta y activas ante cualquier situación que se pudiera presentar.
Pedernales amaneció con cielo nublado, una pequeña brisa fresca y un ambiente fuera del peligro que ofrecía Beryl.
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