El presidente de la Federación Dominicana de Comerciantes, Iván García, afirmó ayer que las ventas de productos refrigerados, como los embutidos y otros, se han reducido en más de un 60 por ciento, debido a la crisis en el servicio energético.

Dijo que las perdidas en los últimos dos meses supera los 500 millones de pesos.

Manifestó que supermercados y farmacias se han visto en la obligación de reducir sus horarios de trabajo, ya que los clientes siente temor de salir de sus hogares a oscuras.

Explicó que negocios de este tipo que cerraban sus puertas a las 10:00 de la noche, actualmente lo están haciendo a las 7:00, «no solamente por lo que significa el alto costo de mantener las plantas de emergencia operando con gasoil, sino también por la oscuridad que hay en la calle y ya los clientes no están acudiendo a los centros comerciales después de la 7:00 de la noche».

Asimismo, refirió que las amas de casa que compraban tres y cuatro pollos para una quincena, ya no lo hacen, sino que lo adquieren diariamente.

«Esta crisis nos tiene prácticamente al borde de la desesperación. Nosotros entendemos que aunque todavía faltan 35 días para la instalación del próximo gobierno, las actuales autoridades deben actuar con urgencia y responsabilidad para que los apagones no sigan siendo el sufrimiento principal de los ciudadanos y para que el sector comercio no continue en este estado de zozobra», insistió.

García, al conversar con reporteros de HOY, luego de participar en la lV asamblea general ordinaria de la Cooperativa de Servicios Múltiples de Ferreteros (COOPDEFE), manifestó que al parecer las compañías distribuidoras de electricidad no tienen conocimiento de las interrupciones «porque estamos recibiendo las tarifas energéticas más elevadas que cuando el servicio era un poco más estable».

Calificó la situación como preocupante y desesperante, ya que tienen que permanecer 8 y 10 horas laborando con la planta de emergencia.