Patadas voladoras, persecuciones a toda velocidad, explosiones sin sentido y un héroe ajusticiado por un crimen que no cometió. Aunque las películas de acción nos pueden ayudar a pasar una tarde aburrida, también tendrían un inesperado efecto secundario en sus espectadores.
Esto porque además del estilo de vida sedentario de quienes ven mucha TV y que puede conducir al aumento de peso, un nuevo estudio de la Universidad de Cornell en EE.UU. ahondó en el contenido que visualizamos, descubriendo que los asiduos al género de las películas de acción comen el doble de calorías que quienes gustan de series más tranquilas o programas de TV de conversación.
La investigación, publicada en el Journal of the American Medical Association indica que al ver estas películas se genera un «efecto de distracción» que deriva en que los espectadores le prestan menos atención a lo que comen, y que incluso buscarían cualquier cosa con tal de saciar su apetito.
En el estudio, se les entregó a 98 estudiantes universitarios una gran cantidad de chocolate, dulces, galletas, zanahorias y uvas, para dividirlos en tres grupos: unos vieron «La Isla», película de Michael Bay (Armageddon, La Roca, Los Transformers) protagonizada por Ewan McGregor y Scarlett Johansson con sonido; otro grupo vio el mismo filme sin sonido, y un grupo final presenció The Charlie Rose Show, un programa de conversación estadounidense.
¿El resultado? El primer grupo comió un 98% más de alimento y un 65% más calorías que quienes vieron el programa de entrevistas. Por el contrario, quienes vieron la película con el sonido apagado sólo comieron un 36% más de alimentos y un 46% más calorías que los espectadores del «talk show».
Según los investigadores, esto sugiere que el nivel de estimulación visual, sonora y emocional deriva en un mayor consumo de alimentos producto de la ansiedad producida por este tipo de películas. Por lo mismo, aconsejaron a los cinéfilos cambiar sus hábitos y comer más verduras saludables, ya que por lo general la idea es comer algo, no importa qué.
Aún así, esperan establecer en un próximo estudio si los cortes rápidos de las películas también favorecen a este tipo de actitud.