“Verdad y realidad”

“Verdad y realidad”

“Hoy tengo deseos de echar una pavita… de botar el golpe… Parece que los años de experiencia pesan y me están pidiendo que baje las revoluciones…”. Así piensa Herminio, mientras camina mirando al infinito y analizando lo que es su verdad… Lo grande es, que se está enfrentando a su realidad… Una verdad, que provoca el nacimiento de una realidad que está viviendo más recientemente… Ha recibido un aviso de replanteamiento de sus actividades, para hacer de su futuro uno más llevadero…
“Jajajajajaaja –explota Píndaro-… ¿Y tú estás perdiendo el tiempo dándole importancia a un susto que te dio en estos días?… Mira, la presión es algo que se te dispara hasta al comerte una batea de fritos… Eso sucede hasta en los atletas… Dicen que cerca de un 33% de la población dominicana es hipertenso y, para que no te sientas más, tu realidad ya indica que has caído en ese grupo de “agraciados” de la lotería de la vida y la verdad es que te debes cuidar más en tu realidad de vida…” –sentencia Píndaro-.
“Es que siento que mis pensamientos a veces se van lejos por esa nueva verdad… Eso me preocupa…” -insiste Herminio-…
“Anjá –expresa Píndaro-… Es que te llegó la hora de pensar un poco más en tí… Siempre te has dado a los demás y has querido hacer de tu propia verdad una realidad… Tus emociones y sentimientos los has convertido en realidad y los has hecho tu verdad… ¡Cuidado!… Lo real no es solamente lo que existe y, sin embargo, la realidad nos explota en la cara cuando menos lo esperamos, porque puede ser producida por nuestros pensamientos y, entonces, nace una verdad imbatible… Una verdadera sustentación de nuestras realidades… Es más, podemos llegar a percibir una realidad y hacernos aprehensivos, lo que nos podría reducir nuestro desempeño… Desde luego, un desempeño más mesurado…”.
“O sea que… -razona Herminio-, ¿tú me estás recomendando que mi realidad es que por el hecho de ser un hipertenso más en el país, mi verdad estará condicionada por nuevas realidades las que tender que controlar?”.
“Efectivamente –sentencia Píndaro-… La nueva verdad a la que te enfrentas, es el molde de una innegable realidad… Es una realidad aumentada que parecías ignorar porque no se había manifestado… Ahora, a través de tu cámara, no solamente podrás ver el mundo exterior sino que tus sentimientos resaltarán con más fuerza en cada percepción que quieras hacer realidad… Esa es tu nueva verdad… Soy de opinión de que, si te atreves a pensar acorde a tus sentimientos, tu realidad va a dar paso a una nueva verdad de vida… Un nuevo conjunto de realidades que, indefectiblemente, serán el nuevo sello de una etapa de tu existencia…”.
“Pero.. –le dice Herminio a Píndaro-, tengo argumentos muy sólidos para, si estoy vivito y coleando, seguir pa’lante hasta que el cuerpo aguante…”.
“¡No te juegues con eso, amigo, -reflexiona Píndaro-… el hecho de que puedas crear argumentos para hacerlos una realidad muy tuya, creyéndote verdaderos, no es motivo para que te formes conclusiones que puedan dar al traste con tu vida… Recuerda que no percibimos toda la realidad y, cuando por equivocación nos la creemos, nuestra verdad se verá condicionada. Debes hacer un alto en el camino… Debes pasar a contemplar no sólo la vida sino ‘tú vida’… Porque, tu realidad está íntimamente ligada a la esencia de tu existencia… a cuánto enriquezcas tu interior… Y, para ello, deberás asegurar tu misma existencia… Deberás hacer de ella tu verdad. Eres necesario para ti y tu realidad…”.

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