Partió  hacia Ginebra, Suiza, la delegación interinstitucional del Gobierno Dominicano que participará en la primera reunión sustantiva a efectuarse en la Organización Mundial del Comercio (OMC), a causa del proceso iniciado por Centroamérica a raíz de la aplicación de una medida de salvaguardia definitiva de 38% de arancel, a las importaciones de todo origen o procedencia de los tejidos tubulares y sacos de polipropileno. 

La reunión enmarcada en las disposiciones del Entendimiento de Solución de Controversias de la OMC, se desarrollará los días 15 y 16 de junio, con la participación de técnicos de la Comisión de Defensa Comercial (CDC), la Dirección de Comercio Exterior (DICOEX), del Ministerio de Industria y Comercio; del Ministerio de Relaciones Exteriores, la Dirección General de Aduanas y la Consultoría Jurídica del Poder Ejecutivo, los cuales estarán acompañados por abogados de la firma Van Bael & Bellis, especialistas en comercio internacional, contratados para asesorar al país por su experiencia en diferendos llevados ante la OMC. 

La salvaguardia definitiva objeto de la controversia fue establecida por la CDC luego de un proceso de investigación que se extendió durante más de un año, en atención a las disposiciones de la Ley No.1-02 sobre Prácticas Desleales en el Comercio y sobre Medidas de Salvaguardias, su reglamento de aplicación y el Acuerdo de Salvaguardias de la OMC.  

Esta medida del 38% de arancel y de 18 meses de duración, se encuentra en aplicación desde el 18 de octubre de 2010, sujeta a un proceso de desmonte escalonado que concluye en abril de 2012. Según el desmonte, la primera reducción arancelaria se efectuó en el primer cuatrimestre de este año, quedando en un arancel actual de 28%. 

Una declaración del grupo técnico interinstitucional emitida previo a su partida, dice que la salvaguardia fue aplicada como una herramienta de la política comercial y ha cumplido satisfactoriamente con su objetivo principal, que es el de salvaguardar “durante un espacio de tiempo previamente definido, a un sector productivo nacional en riesgo, salvaguardando los empleos generados por el mismo y motivando en el sector la inversión extranjera de origen centroamericano”.     

El grupo técnico reiteró que éste tipo de procesos son comunes en el ámbito del comercio exterior y que con la aplicación de la medida de salvaguardia, el país hace uso de un derecho y un instrumento que le confiere su condición de miembro de la OMC, ante el incremento de importaciones que afectan los intereses comerciales de sus sectores productivos.