Ciudad del Vaticano, (EFE).- El vicario apostólico en Libia, el obispo Giovanni Innocenzo Martinelli, ha asegurado que la situación en ese país es «incierta» y que el embargo y las amenazas internacionales «difícilmente convencerán» a las autoridades libias «a ceder».
Martinelli así lo ha manifestado en declaraciones a la agencia vaticana Fides, a la que informó de que ayer se produjeron incidentes en Trípoli, pero que la ciudad está «bien controlada».
«La situación es incierta y todo puede ocurrir. Pero a mi modo de ver, el embargo y las amenazas internacionales difícilmente convencerán a las autoridades libias, aseguró el prelado.
Martinelli agregó que él aún cree que existe la posibilidad de diálogo «para buscar una salida», aunque se da cuenta de que «no es fácil en este contexto, ya que se ha sobrepasado el límite de la violencia». EFE