Vicbart a Atenas

Vicbart a Atenas

Por Rafael Molina Morillo
Nunca he presenciado una competencia de judo. Ni siquiera imagino cómo son las reglas de este deporte. Pero sí sé lo que es una injusticia, como la que se quería cometer contra el atleta Vicbart Geraldino, un joven con tantas medallas ganadas que no le caben en su casa y a quien la iniquidad pretendió impedirle ir a representar a nuestro país en los Juegos Olímpicos de Atenas.

El caso Vicbart ha tenido mucha difusión. A pesar de ser uno de los mejores (si no el mejor) judoka dominicanos, con récords impresionantes a nivel nacional e internacional; hubo tratativas mezquinas para justificar su exclusión del equipo nacional de judo en las máximas competencias del mundo, las de Atenas.

Pero el muchacho se fajó a hacer valer sus derechos, hasta que, finalmente, el Comité Olímpico Dominicano le dio la razón y lo incluyó en la delegación nacional, al mismo tiempo que suspendió al presidente de la Federación de Judo por razones éticas que han de ser investigadas a profundidad.

Vicbart podrá ganar honores y medallas en Atenas, pero también podría ser que no gane ninguna. Eso no es lo importante, en este caso. Lo importante es que ha triunfado la justicia. Y eso nos conforta y nos alegra.

Que sirva la actitud de este joven dominicano como un ejemplo admirable de que cada uno debe luchar hasta lo último en defensa de sus derechos. Que nadie se rinda ante la adversidad. Porque al final, la razón siempre triunfa.

¡Mucha suerte, Vicbart!
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r.molina@verizon.net.do

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