Los querellantes del caso de la estafa financiera de la Corporación de Créditos (Cocretur) dijeron que por la lentitud del proceso judicial contra los ejecutivos de esa entidad, estos habrían podido distraer los fondos.

Ya entrada en su etapa final el juicio, que se conoce en el Primer Juzgado de Instrucción del Distrito Nacional, su temor es no poder recuperar el dinero que confiaron en calidad de ahorrantes a los señores Miguel Horacio Mercado Ornes y Ramón Prieto Vicioso, pues según estos no tomaron las medidas cautelares contra el patrimonio de estos dos, los principales acusados del fraude.

En total son 118 personas las que se querellaron en contra de los señores, pero según Francisco Bernardo Regino, abogado y afectado de la presunta estafa, las víctimas superan las 200 personas.

En el 2012 el monto de los dineros sustraídos era de unos 400 millones pesos solo en depósitos, pero según Regino con los intereses atrasados la suma rondan los 900 millones.

Aunque dice el grupo no duda que Mercado Ornes y Prieto Vicioso sean condenados, tienen el temor que con la excusa de enfermedad, le otorguen prisión domiciliaria.

Indicó que los continuos aplazamientos, producto de incidentes de los acusados retardaron el proceso y fue en febrero del 2016 cuando fue enviado a juicio de fondo, y que todo ese tiempo les dio la oportunidad de estos ocultar sus activos.

A Superintendencia. El grupo de ahorrantes atribuye una responsabilidad a la Superintendencia de Bancos, que aun sabiendo las irregularidades que se daban dentro de Cocretur, no dieron la voz de alerta y estos siguieron haciendo depósitos, además de que cuando se querellaron ante ese organismo por las irregularidades, no recibieron respuesta.

A casi cinco años en lo tribunales se espera que el próximo lunes sea dado el fallo.