Emprendiendo un camino de más de 20 kilómetros, cinco menores de nacionalidad haitiana que viven en Dajabón sin padres, salieron hacia Montecristi con el objetivo de limpiar botas y pedir.

Mucho de los menores que viven en la indigencia en esta provincia, han cruzado la frontera solos porque sus padres murieron, dejándolos en la orfandad.

Mientras que otros tienen sus padres en el país realizando trabajos de motoconchos, vendedores, construcción y otras.

En los parques y calles de la provincia, que hace frontera con Haití, se pueden ver los niños durmiendo en los bancos, pisos y cartones, por lo que los moradores llaman al gobierno a buscar una solución a dicha situación.

A la vez, que otros aseguran que estos se dedican a delinquir debido a su situación, a lo que piden respuestas de las autoridades.

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