«¿Por qué esta mujer debe ser víctima de ataque de una persona, si cuando pasan esos casos es para robarle o para ser violarla? Entonces aquí no hubo nada de eso», cuestionó el vocero del Cuerpo Especializado de Seguridad Turística (Cestur), Ramón Brito, sobre el ataque que sufrió la turista estadounidense Tammy Lawrence-Daley, en un hotel de Punta Cana.

“Hay muchas informaciones que no concuerdan con algunas de sus declaraciones, pero tenemos que esperar que la investigación concluya”, aseguró Brito sobre los testimonios que presentaron tanto ella como su esposo.

Pero además, «la señora se niega a los requerimientos legales del proceso de investigación como el anticipo de pruebas, test psicológico, pero además, no puso la denuncia».

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El caso ha sido calificado como complejo «porque no concuerda nada de lo que dijo la turista con lo que hemos investigado y lo que se le ha dado a ella para que reconozca al agresor».

Explicó que inmediatamente después de que se conoció el hecho el 29 de enero (caso que fue dado a conocer esta semana porque la afectada lo hizo público),  los investigadores visitaron a la víctima en la clínica donde estuvo internada, tomaron su testimonio y el de su esposo y levantaron evidencias del lugar donde ella dijo que estuvo cautiva.

Estas declaraciones fueron ofrecidas durante su participación vía telefónica en el programa El Sol de los Sábados, que se transmite por Zol 106.5 FM, de 7 a 9 de la mañana, conducido por Orlando Jorge Villegas, Julio Alberto Martínez, Millizen Uribe y Pedro Manuel Casals.

Se recuerda que Tammy Lawrence-Daley, de 51 años y oriunda de Delaware, narró esta semana en Facebook el violento ataque que sufrió en ese hotel de Punta Cana. Aseguró que en su segunda noche en el complejo un hombre con un uniforme como el de los empleados del hotel la atrapó mientras se dirigía a la playa para tomar algunas fotos de la luna sobre el agua y la arrastró hasta un cuarto de mantenimiento donde la golpeó y estranguló.

Durante el ataque se rompió la boca, lo que requirió numerosos puntos de sutura. Un diente fue arrancado y otros fueron empujados fuera de su posición, dijo en una entrevista telefónica con The Associated Press. Se le rompió la nariz en varios lugares, sufrió una fractura orbital y tenía marcas de dientes en su cadera.

La mujer, que estaba de vacaciones con su marido y una pareja de amigos, dijo que decidió hacer pública su historia para ayudar a otras mujeres y advertir a los turistas sobre qué esperar de la administración del centro turístico.