Los cambios no tienen que ser complicados. Algunas veces, un equipo tiene lo que quiere el otro, y viceversa, y una llamada de 10 minutos puede ser suficiente para que todo el mundo salga contento. Eso ha pasado muchas veces a lo largo de los años.
Entonces, antes de que las cosas se empiecen a mover a toda velocidad a medida que se acerque la fecha límite del 31 de julio para cambios sin el proceso de waivers, vamos a darles un vistazo a cinco cambios que suenan tan lógicos que sería una sorpresa si no se completaran:
1. Cole Hamels a los Yankees
Los Rangers quieren hacer negocios y los Yankees necesitan pitcheo abridor. Hamels encaja en el molde, especialmente por su experiencia en postemporada (16 aperturas, 3.48 de efectividad). Pero alguien podría pensar que el dinero que se le debe complica las cosas.
Al contrario, podría simplificarlas, y no porque los Yankees tengan dinero para pagar los US$12 millones que le restan al contrato de Hamels, sino porque tienen prospectos. Texas podría pagar buena parte del dinero que se le debe a Hamels a cambio de lo que más necesitan, lanzadores jóvenes como el zurdo Justus Sheffield y los derechos dominicanos Albert Abreu y Fréicer Pérez.
2. J.A. Happ a los Marineros
El gerente general de los Marineros, Jerry Dipoto, es uno de los directivos más agresivos de Grandes Ligas y es casi una certeza que sumará a un abridor para un equipo que viene jugando muy bien. Happ, de 35 años, es un candidato natural a pesar de que Seattle tiene otros tres zurdos (James Paxton, Marco Gonzales y Wade LeBlanc).
Tiene una sólida efectividad de 3.48 en las últimas cuatro temporadas. Con la agencia libre aproximándose, los Azulejos seguramente escuchen ofertas. Toronto pediría al jardinero Kyle Lewis, el primer prospecto de Seattle.
3. Zach Britton a los Astros
Esto implica riesgos, porque Britton apenas acaba de empezar su rehabilitación para terminar de sanar de la rotura del tendón de Aquiles derecho. Por otro lado, los Astros lo necesitarían sólo para cuatro semanas en octubre, por lo que pueden darse el lujo de llevarlo con calma.
Aunque otros relevistas como el dominicano Kelvin Herrera, el cubano Raisel Iglesias y Brad Hand–también podrían ser cambiados, ninguno tiene el pedigrí de Britton. Cuando el zurdo de los Orioles está sano, puede decirse que hay muy pocos mejores. En sus últimas tres temporadas completas, promedia 68 juegos por año con 1.38 de efectividad, 0.909 de WHIP y 9.3 ponches por cada nueve innings.
Dado que Britton también se acerca a la agencia libre, los Orioles podrían estar más motivados para completar un cambio que estuvo cerca de lograrse el año pasado.
4. Manny Machado a los D-backs
Este cambio luce demasiado lógico para no producirse. Los Orioles necesitan prospectos. Los D-backs necesitan ofensiva. Cuando Baltimore esté listo para vender-y eso viene–Arizona casi con seguridad será el primero en llamar.
Ambas partes conversaron sobre Machado durante la temporada muerta, pero los Orioles no estaban listos para jalar del gatillo. Sí, Machado probablemente sea un pelotero de alquiler, decidido a probar la agencia libre. Pero si ayuda a los D-backs a llegar a la postemporada, todo el mundo saldrá ganando.
Los D-backs saben que tienen que ser agresivos, así que si eso implica entregar a su prospecto número uno, el derecho Jon Duplantier, pues que así sea.
5. Josh Donaldson a los Cardenales
Los Cardenales buscaron a Donaldson en invierno pasado, pero los Azulejos todavía tenían en mente competir. Sin embargo, ya llegó la hora de que Toronto le abra paso a su nueva generación.
Para los Cardenales, la interrogante clave es la salud de Donaldson. El veterano se ha visto limitado por problemas de pantorrilla y hombro los últimos dos años, y esta semana regresó a la lista de lesionados (pantorrilla izquierda). Venía de dar hit en siete juegos seguidos y lucía cómodo en el plato.
San Luis tiene a varios prospectos estelares. ¿Será suficiente entregar a uno de ellos, como el diestro Dakota Hudson o el receptor Andrew Knizner?