Era visible durante el velatorio de los tres hermanitos que se ahogaron en laguna de San Pedro Macorís, la consternación entre familiares y vecinos.
Mientras los cuerpos de Jose Enrique Mota, Ricardito Mota y Richard Mota de 12, 8 y 6 años de edad respectivamente, yacían en sus ataúdes sus allegados no podían esconder su tristeza por tan grande tragedia.
Y es que nadie se esperaba que los menores, quienes pidieron un permiso a sus padres para volar chichigua terminarían muertos, en una laguna en la comunidad Tintero del Cruce de Cayacoa, en el municipio San Jose de los Llanos.
«Viene el niño mío más chiquito y me dice que corra que sus hermanos se habían tirado en el hoyo y no podían salir. Se hundieron», entre lagrimas Antolín Mota Nieves, progenitor de los fallecidos narró que así fue como se enteraron del lamentable hecho.
Los restos de los menores fueron sepultados en la mañana de hoy en el cementerio municipal de Villa Hermosa.