El gimnasio al aire libre y la cancha de baloncesto que construyó el Gobierno como parte del proyecto La Nueva Barquita, en Santo Domingo Norte, experimenta desde hace meses un progresivo deterioro por la falta de mantenimiento.

Las máquinas para el ejercicio físico del gimnasio ubicado en el perímetro de la vía que conduce al proyecto modelo del Gobierno, presentan desperfectos en su mayoría, con piezas oxidadas, rotas y en muy mal estado.

El cúmulo de fundas plásticas y el avance de las yerbas provenientes de solares contiguos son también parte del adorno que exhibe esta área, a la que acuden decenas de personas de La Nueva Barquita y otros lugares, tanto en horas de la mañana, a partir de las 5:00, como en la tarde.

A estos males se le agrega la falta de los 11 postes para la colocación de las lámparas que iluminarían el espacio, permaneciendo el lugar totalmente a oscuras y evitando con esto que las personas que llegan de trabajar luego de las 5:00 de la tarde, puedan ir al lugar.

Mal construido. Situación similar presenta el área donde se encuentra la cancha de baloncesto, contigua al gimnasio, donde el tabloncillo permanece agrietado y hendido, lo que demuestra que en el proceso de construcción se ignoraron la calidad de los materiales y otros elementos.

Jóvenes que juegan con regularidad en la cancha aseguraron que la misma se ha mantenido en ese estado por alrededor de ocho meses, sin que nadie acuda ni siquiera a cambiar las bombillas que permanecen dañadas.

Se quejaron de que, siendo el único y más adecuado lugar para pasar el tiempo de manera sana, las autoridades permitan que éste se encuentre en esas condiciones.

Precisaron que aunque el área de ejercicio y juego se encuentra a poco menos de un kilómetro de donde están los edificios de apartamento del proyecto, ese espacio fue construido en el mismo período y como parte de La Nueva Barquita.

Además de baloncesto, el tabloncillo de la cancha es usado en horas de la mañana para bailes de zumba, siendo la rutina de un grupo significativo de mujeres tanto de La Nueva Barquita como de sectores del Edén y otros de Villa Mella.

En horas de la mañana, decenas de personas de edad avanzada proveniente del proyecto y de otros lugares acuden a caminar al lugar, siendo el área del gimnasio al aire libre su última parada para concluir su rutina de ejercicio.