En un día de campo soleado y tranquilo, totalmente alejado de la política, Ramfis Domínguez Trujillo celebró el Día del Padre junto sus hijas y toda su familia.
El aspirante presidencial es el padre de Sofía, Andrea y Alexandra Domínguez.
Alexandra es la más tímida, pero al estar junto a él se vuelve un poco más extrovertida. Andrea y Sofía son más conversadoras.
Para Sofía, la mayor, Ramfis es un padre amoroso y relajado; alguien con quien ella y sus hermanas hablan de todo: de los novios, de las amigas; “de las fiestas, de la educación y de la escuela”.
Asimismo, cuenta que, cuando tiene un mal día, la primera persona que llama es su papá, “y siempre, siempre, siempre toma mi llamada”, enfatiza.
«Cuando me encuentro en situaciones difíciles, el consejo que él siempre me da es que tiene es creer en Dios y dejar que me guíe. Y me dice que tengo que rezar y mirar al problema como si yo fuera la otra persona, y ver cómo resolver el problema lo más diplomática que puedo. Siempre con Dios y siempre con diplomacia”, afirma.
En ese orden, Sofía también recuerda que cuando tenía sólo cuatro años, nació su hermana menor: Alexandra. Y, mientras su padre sostenía la recién nacida en los brazos, dentro del vehículo en el que se encontraban en aquél momento, miró hacia el asiento de atrás donde estaban ella y su otra hermana, Andrea. “Y él nos miró. Mi papá nunca llora. Pero yo me recuerdo ese momento, era tan… yo sentía, que él sentía tanto amor que empezó a llorar, solamente un poquito. Y él nos dijo que esta era nuestra canción: El privilegio de Amar, porque él tenía el privilegio de amarnos”, dijo visiblemente conmovida.
Ramfis, al ser cuestionado sobre cómo pasan el tiempo libre juntos, reveló que en su casa tienen la denominada hora loca. “Sí, cuando yo estoy ponemos la música a todo dar y empezamos a bailar por toda la casa…”
“O papi toca el piano y Andy (Andrea) canta, yo canto y Alexandra canta”, agregó Sofia.
“O brincamos encima del sofá o encima de las mesas, algunas veces”, dijo Domínguez Trujillo mientras señalaba a su hija menor y todos reían.
La sorpresa. Esta vez querían ser ellas quienes le dedicaran una canción, con la cual le expresaran todo el amor que sentían hacia a él. Así que, sin que él sospechara de qué se trataba, le dijeron que habían estado practicando una canción.
Entre sorprendido y confuso comenzó a escuchar cómo sus hijas le decían que es el padre que siempre soñaron, entonando las letras de la canción que lleva el mismo nombre (Eres el padre que siempre soñé), del cantante cristiano Abel Zavala.
Aunque intentó contener las lágrimas, no lo logró del todo. Pero luego de ser llenado de besos y recibir la felicitación de sus hijas, pudo salir un poco del shock en que el se encontraba después de semejante sorpresa.
En este punto expresó: “le deseo a todos los padres de la República Dominicana, tener tres hijas tan maravillosas como las mías. Que la dicha de papá Dios sea con todos ustedes. Yo me siento demasiado bendecido, realmente. He sido una persona que he recibido demasiado y por eso, mientras más grande el regalo que uno recibe de papá Dios, más grande es la responsabilidad que uno tiene”.