El joven Abel Manuel Liranzo, quien tiene una pierna y brazo deformados por causa de la polio que sufrió cuando niño y se ganaba la vida vendiendo dulces y botando basura en un triciclo para pagar sus estudios.
Le pide al director del Liceo Ramón Emilio Jiménez que le reponga en su empleo de profesor de Ciencias Sociales ya que él trabajó diez meses y nunca llevaron sus documentos a tiempo para realizar su nombramiento.