Aproximadamente 54 nacionales haitianos sacan sus manos por las ventanas del Centro de Retención de Haina, piden comida y ayuda a las decenas de personas que coordinados por el Centro Bonó encabezan una vigilia clamando por un trato justo para esas personas.

«No trato inhumano contra los haitianos» fue el reclamo que elevaron organizaciones y activistas por los derechos de los migrantes frente al Centro, desde donde diariamente al menos 50 nacionales haitianos son repatriados a su país.

El padre Mario Serrano, director ejecutivo del Centro Bonó,  deploró el trato cruel, inhumano y degradante que reciben los migrantes que atribuye a la falta de transparencia, la arbitrariedad y el abuso de poder.

Mediante una dramatización explicaron que a pesar de que familiares de nacionales haitianos que son apresados por la Dirección de Migración traen documentos demostrando la legalidad de sus parientes,  se les exigen  dos mil 500 pesos para dejarlos ir a sus casas.

Serrano realizó un llamado a las autoridades para que reformen el procedimiento de deportación, ya que en esta no existe una tutela judicial de las garantías del debido proceso.Explicaron que convocaron la actividad porque hoy se celebra el Día de los Derechos Humanos.