POR L. RAMÍREZ S.
Si el proyecto de reforma fiscal se trunca, mediante la reducción de los ingresos que debe percibir el gobierno, estará en peligro el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), refirió Temístocles Montás, secretario Técnico de la Presidencia. Sin embargo el funcionario estimó que los legisladores tienen una actitud de colaboración respecto a esa propuesta de reforma tributaria.

Montás, en el almuerzo del Grupo de Comunicaciones Corripio, expresó que los planteamientos de los legisladores implican  una reducción de ingresos estimados en RD$7,000 millones. El gobierno pretende recaudar RD$32,000 millones mediante sus propuestas impositivas.

“Estamos en una fase de negociación con la Cámara de Diputados, para  resolver algunos temas que han sido planteados por la comisión de Finanzas de esa entidad,  pensamos que podemos lograr solucionar esos temas porque hay la convicción de que se trata de una reforma compensatoria.

“La discusión de ayer (el martes) giró en torno a explorar alternativas que permitan, en caso de que puedan asumirse, encontrar esos recursos en otras fuentes tributarias. La reunión continuará hoy, a partir de la una de la tarde y estaremos en condiciones de lograr algún acuerdo”.

Montás también resaltó que el gobierno está en condiciones de consensuar,  siempre y cuando se entienda que, dada su precariedad fiscal, hay que lograr que esa reforma sea compensatoria, porque no puede darse el lujo de perder un centavo de los recursos que dejará de percibir producto de la eliminación de la comisión cambiaria y los aranceles asociados al Acuerdo de Libre Comercio entre Estados Unidos, Centroamérica y República Dominicana (CAFTA-RD).

“Habrá alguna manera de salvar los escollos porque hay una actitud de colaboración de parte del Congreso, los legisladores comprenden las implicaciones de la reforma, ya que no está únicamente asociada al CAFTA-RD, sino también al programa con el FMI, y hemos dicho que lo que se ha calculado en la misma ha sido con el conocimiento y aprobación tácita de este organismo crediticio”.

La reforma fiscal, enviada a la Cámara de Diputados el 8 de septiembre del 2005, plantea entre otros aspectos la ampliación de la base del Impuesto a las Transferencias de Bienes Industrializados y Servicios (ITEBIS), que es de un 16%, la eliminación de la comisión cambiaria, y el aumento a 28% el impuesto sobre la renta.

DESGRAVACIONES

Cocco, director de Aduanas, expresó que en el proyecto de reforma fiscal se eliminan 3,800 partidas arancelarias para no hacer un esquema tributario que desarrolle un mercado monopólico para Estados Unidos, sino que el mismo producto de otro origen tenga igual tratamiento.

Lo contrario sería, según él, atarse a largo plazo a un mercado que constituiría una expresión monopólica de relaciones. “El esfuerzo que hace el gobierno es sincero, que tendrá inevitablemente sus costos políticos, pero que vemos también el costo económico, porque si no llegamos junto con Centroamérica al mercado norteamericano nos quedaremos rezagados y el Estado dominicano tendrá pérdidas millonarias”.

“Las desgravaciones que se han hecho han sido discutidas con todos los sectores, por eso no podemos cambiar lo que ha sido acordado para establecer otras medidas, por eso las modificaciones que se vayan a hacer, dentro del espíritu de apertura que tiene el gobierno, tienen que venir del mismo sector que consensuó”.

Al abundar sobre ese tema, Juan Hernández, director de Impuestos Internos, refirió que con el sector hotelero ha habido acuerdos, mediante los cuales, este se compromete a deponer sus reclamos en aras de que la reforma se apruebe lo mas rápido posible y luego el gobierno se sentará a discutir sus demandas, que incluyen un ITEBIS diferido de 8% para el área turística.

Cocco también dijo que la reforma tributaria “no es sencillamente una impronta que queremos usar, es que no va a haber modernidad si no hay equidad fiscal en el continente, pues para competir con Centroamérica debemos tener los mismos márgenes desgravatorios o similares, con el componente de que la energía eléctrica es determinante en el costo de nuestros productos.

“Por eso estamos desmontando aranceles, sustituyendo algunos por el ITEBIS, y otros por impuestos sobre la renta al final del proceso productivo”, precisó.