La Fundación para el Desarrollo de Villa Altagracia (Fudeva) denunció ayer que el acueducto que construye el Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (Inapa) contiene desperfectos técnicos, además del retraso de los trabajos, situación que indigna y frustra a la población que lleva más de cuatro décadas con escasez de agua.

La obra exigida por la comunidad empezó en enero de 2021, con una inversión de RD$ 800 millones, para inaugurarse dos años después, según el director del Inapa, Wellington Arnaud.

Fudeva indicó que invitó al funcionario a una reunión con el liderazgo del municipio, en abril, en el que este garantizó que el acueducto sería entregado en noviembre, lo que creen imposible, debido a las alegadas irregularidades cometidas en la construcción.

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Entre las supuestas irregularidades están fallas graves en el dique que debería construirse en el río Haina, a la altura del kilometro 45 de la autopista Duarte.

La fundación asegura que Inapa desaprovechó el largo período de sequía para hacer esa obra y las lluvias de junio y julio destruyeron lo poco que habían adelantado, por lo que “ahora hay que comenzar casi de cero”.

Otra irregularidad grave, señalada por la comunidad, la habría cometido la empresa subcontratada para la instalación de la red de tuberías que conducirá el agua desde la obra de toma hasta el tanque de almacenamiento, ubicada a unos 5 kilómetros.

Fudeva agregó que esas tuberías fueron instaladas al revés y que detectadas las fallas hubo la necesidad de desenterrarlas para instalarlas de nuevo.

“Hacemos un llamado al director de Inapa y al presidente Luis Abinader, para que intervengan y sea retomada la construcción.