Más de dos mil fieles católicos residentes en Villa Mella y comunidades aledañas desfilaron ayer desde la Avenida Hermanas Mirabal hasta la iglesia Las Mercedes, localizada en la Ciudad Colonial. Los fieles desfilan contra  la violencia, la drogadicción y otros males que afectan a la sociedad dominicana. La marcha fue encabezada por el sacerdote  Juan Francisco de Jesús, párroco de la Iglesia Santa Cruz, quien exhortó  a los dominicanos a que busquen el auxilio de Dios para poder enfrentar los desafíos económicos y sociales que tiene la nación.

Más de dos mil personas de Villa Mella marcharon ayer por  avenidas como las Hermanas Mirabal,  Ovando y Duarte, así como las calles Moca, María Montez, Pedro Livio Cedeño y  Juan Erazo, entre otras,  hasta llegar a la iglesia Las Mercedes en la Ciudad Colonial. El recorrido fue realizado para reclamar en contra de la violencia, la drogadicción y otros males que afectan a la sociedad dominicana,

La marcha fue encabezada por el sacerdote  Juan Francisco de Jesús, párroco de la Iglesia Santa Cruz, quien exhortó  a los dominicanos que busquen el auxilio de Dios para poder enfrentar los desafíos económicos y sociales. 

De Jesús dijo que llevan 18 años realizando actividades de penitencia durante esta fecha, la que aprovechan para exigir soluciones a los grandes males que afectan a la comunidad, de la que la iglesia no puede estar ausente,

El sacerdote consideró que el mejor ejemplo  que se puede exhibir a la juventud es la práctica y la enseñanza de Jesús, quien ofreció su vida por salvar  la humanidad.

Sostuvo que hay muchos jóvenes y adultos que se han salido del camino correcto para meterse en vicios y otros actos reñidos con la ley, pero que pueden ser rescatados llevándole el mensaje cristiano.

En la marcha-víacrucis fue notoria la asistencia masiva de jóvenes de ambos sexos, además de adultos que salieron de la iglesia Santa Cruz a la siete de la mañana y llegaron a la Mercedes pasadas las diez.

Tomato Arias, coordinador del Consejo Parroquial pidió por el cese de la violencia y la delincuencia que azota a la sociedad dominicana, mientras lanzó una plegaria a Dios para que ilumine al pueblo dominicano, de manera que pueda salir airoso de los grandes desafíos que se producen en el mundo.

Consideró que en vez de que cualquier agrupación política o sindical salga por las calles a anunciar a cuaquier “pela gato” que lo hagan con Jesucristo que ha demostrado ser el único que nos puede salvar de la crisis mundial que nos afecta.

Los feligreses llevaban cruces y alababan a Dios durante todo el trayecto.

Es la segunda vez que en menos de cinco días, se produce una manifestación  de esta naturaleza.  La anterior fue convocada por la Parroquia Paz y Bien y el Colegio San Francisco de Asís, del ensanche Ozama, y en ella también se reclamó el cese de la violencia.

Las claves

1. Ir al rescate

Muchos jóvenes y adultos que se han salido del camino correcto para meterse en vicios y otros actos reñidos con la ley  pueden ser rescatados llevándole el mensaje cristiano, dijo el cura.

2. Juventud integrada

Fue notoria la asistencia masiva de jóvenes de ambos sexos y edades,  así como de adultos que salieron desde la iglesia Santa Cruz a la siete de la mañana y llegaron a la de Las Mercedes pasadas las diez  de la mañana.