Violencia que no da tregua

Violencia que no da tregua

La violencia criminal ha enraizado en nuestra sociedad de manera preocupante.

El Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) es el mejor instrumento para medir tendencias  en el comportamiento de nuestra gente. En el año 2011, ese instituto analizó 2,263 casos de fallecimientos y comprobó que 1,523 de ellos (67.3%) correspondieron a causas violentas, y que entre las causas violentas de decesos, 1,167 casos (76.6%) fueron homicidios.

Además, las estadísticas del INACIF permiten medir tendencias en cuanto a los métodos o medios empleados para provocar muerte. El instituto comprobó que disparos de armas de fuego mediaron en 908 (77.8%) de los   1,167 homicidios.

Las restantes muertes fueron provocadas por  arma blanca,  traumas por objetos contusos,  asfixia en varias modalidades y un caso por Síndrome del niño maltratado. 

Enfrentar de manera efectiva la inclinación homicida tiene que ser materia de una estrategia que permita atacar las causas de esta tendencia en el comportamiento social. 

Es evidente que estamos ante una situación que obliga a hacer algo más que registrar y contabilizar  muertes. Hay que dar un paso adelante en procura de contrarrestar esta violencia que no da tregua.

Otra vertiente del problema

La inseguridad ciudadana, a la que se debe mucha de la violencia homicida que existe en el país y que se refleja en las estadísticas que maneja el INACIF, ha obligado a la gente a buscar seguridad de todas las maneras posibles,  desde colocar rejas metálicas para proteger puertas y ventanas hasta exigir que ese factor sea tomado en cuenta en el diseño de los proyectos habitacionales privados.

Directivos de la  Asociación de Constructores y Promotores de Viviendas (Acoprovi) han revelado que  los potenciales adquirientes de viviendas son cada vez más exigentes en lo que concierne a  la seguridad de los proyectos habitacionales, debido a  la inseguridad ciudadana generalizada.

Esta exigencia ha obligado a los constructores a incluir protección que no formaba parte de los estándares de diseño. Así anda la seguridad en este país.

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