Un nuevo virus cuyos síntomas son semejantes a dengue circula en el Caribe. La confirmación de diez casos de fiebre chikungunya en la isla francesa de San Martín ha encendido las alarmas ante una posible propagación a otras islas caribeñas del virus cuya circulación sólo se había detectado en zonas de África, Asia y de Oceanía.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha confirmado los primeros casos de esta fiebre en San Martín, a unos 723 kilómetros de la República Dominicana.

Tras las advertencias de la OMS de la existencia del virus en la zona, el ministro de Salud Pública, Freddy Hidalgo, dijo que ese ministerio estaba atento a las informaciones al respecto y se espera que ante la presencia del chikungunya en la isla de Martinica, el ministerio aborde la situación. “Estamos atentos a la evolución que pueda tener ese virus”, comentó.

Según la Organización Mundial de la Salud, la fiebre chikungunya es una enfermedad vírica que se propaga por la picadura de mosquitos infectados (Aedes Aegypti y también a través de Aedes Albopictus).

Generalmente dura entre cinco y siete días, y produce frecuentemente dolores articulares graves, a menudo incapacitantes, y que puede persistir por mucho tiempo.

Así mismo, un estudio realizado por este organismo de la salud explica que raramente pone en peligro la vida del paciente. La enfermedad carece de tratamiento específico, pero se pueden utilizar analgésicos y antiinflamatorios no esteroideos para reducir el dolor y la tumefacción. Debe evitarse la aspirina.

Aunque la sintomatología suele remitir entre los siete y los diez días, el dolor y la rigidez articular pueden persistir durante varios meses.

Las complicaciones. Las complicaciones son raras, síntomas neurológicos: encefalitis, trastornos neurológicos de las extremidades, complicaciones hepáticas, Así como complicaciones renales. Por lo general, el virus chikungunya es una enfermedad benigna.

Medicación. No hay vacuna contra el virus, de modo que las medidas preventivas consisten en evitar las picaduras de los mosquitos, que se producen sobre todo durante el día, y en eliminar sus criaderos.

Tanto lo OPS como la OMS “urgen a los Estados en los que circula el mosquito transmisor de esta patología a que establezcan y mantengan la capacidad para detectar y confirmar casos, manejar pacientes e implementar una efectiva estrategia de comunicación para que la población esté al tanto”.

 Expansión 2006. El virus chikungunya, identificado por primera vez en Tanzania, infectó entre los meses de febrero y octubre de 2006, en la India y Asia meridional un total 1,25 millones de personas. Desde entonces se han producido otros brotes a gran escala en países de África oriental y central y del Océano Índico, como las Comoras, el Gabón, Madagascar, las Maldivas, Mauricio, las islas Mayotte y La Reunión (Francia) y Seychelles.

2007. Se notificó un brote en Italia tras un caso importado. El resurgimiento de la fiebre chikungunya en los últimos años y su impresionante extensión geográfica destacan nuestra vulnerabilidad a las enfermedades infecciosas emergentes propagadas por insectos y ponen de relieve la importancia de los programas de control ininterrumpidos para la seguridad sanitaria.