Peter Drucker decía: “Líder es quien tiene seguidores”. Se observa en política, empresas, sindicalistas, religiosos o cualquier actividad. Al líder eficaz no se le quiere o admira, se le sigue en sus orientaciones. La popularidad no es liderazgo. Los resultados sí definen a un líder. Son mujeres y hombres de principios y valores, que se distinguen en las crisis. El liderazgo no es un rango, privilegio, título o dinero: el líder cumple con sus deberes y obligaciones.
La crisis alimentaria mundial y las recesiones económicas en occidente, aunque son cíclicas, se presentan por falta de visión de los dirigentes de USA, Japón, Alemania e Inglaterra. Falta de imaginación y creatividad en los funcionarios del FMI, Organización Mundial de Comercio, ONU, FAO, OEA, BID, IICA, CEPAL e ILPES.
Es decir, que a nivel internacional no hubo un país, o una organización que estuviera pensando en las tendencias de los alimentos, motivo por el cual, a partir de 2007 se sentía el alza de alimentos, pero el problema explotó en el primer trimestre del 2008 y todavía se siente en algunos países.
Esto significa que hay escasez de liderazgo en el mundo. El Banco Mundial y el FMI deberían crear unidades de inteligencia, para que anualmente se haga un informe sobre las previsiones en la agricultura, ganadería, foresta y la economía global.
En las dos guerras mundiales hubo incompetencia militar, ya que no murieron muchos generales, sino militares de rangos inferiores y los pueblos inocentes. La primera crisis alimentaria que registra la historia aparece en el Génesis del Antiguo Testamento, cuando José, hijo de Jacob, fue vendido por sus hermanos a mercaderes de Egipto y como José era un líder, el Faraón lo nombró encargado de la producción, y así cuando llegaron los años de las vacas flacas, Egipto tenía suficiente trigo almacenado para alimentar la población.
Los líderes trabajan apegados a sus principios y valores, con auto control para poder dirigir, equilibrio emocional y así poder tomar decisiones acertadas, firmes y precisas, las cuales han sido planificadas en base al conocimiento, la preparación y saber dirigir el equipo de colaboradores.
En la actualidad falta visión entre los funcionarios del Gobierno y los empresarios, para poder orientar a las mujeres y hombres a crear riquezas e instituir una cultura de exportación, competir en los mercados del DR-CAFTA, con USA y Centroamérica y el tratado con la Unión Europea, conocido como EPA.
En el 2016 hace falta financiamiento a largo plazo (hasta 15 años, con 4 años de gracia, sin cobrar el capital), para invertir en las infraestructuras que demandan los proyectos de exportaciones en cacao, aguacate, piña, agroindustria e industria. Hay que saber penetrar al mercado nacional e internacional, con apropiadas organizaciones empresariales. Sugiero estudiar el sistema de exportación de Costa Rica y copiar lo bueno. Necesitamos preparar gentes con visión y liderazgo, para el desarrollo sostenido.