La viuda del  desaparecido catedrático universitario Narciso González, Altagracia Ramírez, y su abogado  Tomás Castro, dijeron ayer sentirse molestos y ofendidos al no ser recibidos por la fiscal del Distrito Nacional, Yeni Berenice Reynoso, quien los  citó formalmente a una reunión en  la mañana para tratar el tema de la reanudación de la investigación sobre la desaparición del profesor.

Martínez y Castro llegaron hasta el antedespecho de la titular del Ministerio Público.  Se marcharon enojados de la Fiscalía cuando les informaron que la fiscal debió salir supuestamente a un encuentro con el procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito. La viuda del desaprecido profesor de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), desaparecido el 26 de mayo de 1994, entendieron   que Reynoso los dejó plantados.

Estaban citados para las 10:00 de la mañana y aguardaron  alrededor de una hora. La viuda  consideró que el comportamiento de la fiscal era un juego con el valor de las personas, del pueblo. Expresó que la actitud de la fiscal no solo afecta a la familia de Narciso González (Narcisazo) y a la Comisión de la Verdad (que procura que se reanude la investigación), “sino a todo el pueblo dominicano que quiere ver que ese caso se tome en cuenta y que llegue a una solución, como debe de ser”.