POR MICHAEL SMITH
Del NY Daily News
MINNEAPOLIS.- Mientras una turba de reporteros rodeaba a Alex Rodríguez, Mike Mussina le ladró al tercera base desde el otro lado del clubhouse. “Vamos, ¿seis jonrones en siete juegos? El está supuesto a hacer eso”, dijo Mussina. “Solo pregúntense ustedes mismos”.

Su compañero de equipo Derek Jeter también bromeó con A-Rod durante la victoria 10-1 de los Yanquis sobre Minnesota el martes en la noche.

Puede que haya tomado más de tres años, pero hay señales de que Rodríguez finalmente está encajando con los Yanquis.

Rodríguez sacó la bola del parque en su cuarto juego consecutivo para apoyar una sólida presentación de Andy Pettitte, luego se rió y bromeó con varios compañeros de equipo después del partido.

“Alex ha estado haciendo buenos swings, tan bien como nunca lo había visto”, dijo Jeter. “Le pregunté si le pasaba algo cuando falló con un elevado”.

Rodríguez, quien tuvo problemas para caer en gracia en el clubhouse de los Yanquis y con sus fanáticos en las primeras tres temporadas en Nueva York, pegó su sexto cuadrangular en la primera entrada.

Johnny Damon añadió un palo de tres carreras en el quinto, y Pettitte permitió cuatro hits en seis entradas en blanco para ganar su partido 150 con los Yanquis y su primero desde el 2003.

Los Mellizos han anotado seis carreras en los últimos cuatro juegos, aunque dos de ellos fueron jugados en condiciones muy frías durante una serie del fin de semana en la casa de los Medias Blancas.

Rodríguez ha estado haciendo que el bateo se vea como algo fácil esta temporada. “El se ve muy cómodo”, dijo el dirigente Joe Torre antes del partido. “No está jugando suave. Está retando a los demás a que le hagan out”.

En la primera entrada, A-Rod se inclinó y buscó un pitcheo bajito en la zona y de inmediato puso a los Yanquis arriba. “Estoy viendo la bola muy bien”, dijo. “Con suerte, las cosas siguen”.

Rodríguez se convirtió en el noveno jugador de las mayores y el primer Yankee, en conectar seis jonrones en los primeros siete juegos de la temporada. Mike Schmidt, de Filadelfia, quien pegó siete en sus primeros siete juegos de la campaña de 1976, es el único jugador en conectar más en ese período.

Preocupaciones quedan atrás

Desde su llegada a los Yanquis, el toletero Alex Rodríguez ha enfrentado una gran cantidad de “líos”.

El primero fue su paso de ser considerado el mejor torpedero de las Grandes Ligas a la tercera base. Aunque no se habló mucho de ello públicamente, en el trasfondo siempre estuvo la inconformidad de Rodríguez por jugar en una posición diferente a la número seis.

La misma relación tensa con Jeter se mantuvo como un problema constante, tomando en consideración que los “amigos” de antaño se tornaron en “distantes” relacionados por los comentarios expresados por Rodríguez antes de llegar a Nueva York. Antes de comenzar esta campaña, incluso, Rodríguez declaró que lamentaba no ser amigo de Jeter como antes, pero que eso no le afectaba en su desempeño en el día a día.

Pero los principales problemas que ha enfrentado Rodríguez han sido con su falta de producción en los momentos apremiantes como las varias postemporadas en las que ha tenido el chance de jugar.