Giorgio Armani: El ‘power suit’
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La industria de la moda perdió la semana pasada a uno de sus grandes referentes, Giorgio Armani, el diseñador que convirtió la sobriedad y la elegancia en sinónimos de estilo atemporal. Su legado trasciende las pasarelas y cambió para siempre la manera de vestir de hombres y mujeres.
Desde el lanzamiento de su primera colección en 1975, Armani sorprendió al mundo con una propuesta que rompía esquemas. En lugar de seguir las tendencias dominantes, impuso una estética más relajada y sobria: el traje desestructurado. Eliminó forros, hombreras exageradas y siluetas encorsetadas, transformando el traje en una prenda fluida, de caída natural, que ofrecía libertad de movimiento.
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Un año más tarde, en la colección primavera-verano de 1976, creó el icónico ‘power suit’. Armani adaptó el traje masculino al cuerpo femenino, suavizando su rigidez y aportando una silueta más libre. Las hombreras daban presencia sin excesos, mientras que las telas ligeras reforzaban la comodidad sin sacrificar elegancia.
Uno de los momentos más recordados llegó en 1990, cuando Julia Roberts recogió el Globo de Oro por ‘Prety Woman’ con un traje de Armani. Aquel gesto redefinió la idea de “poder femenino” en la alfombra roja y abrió un camino para mujeres ejecutivas y celebridades que buscaban proyectar autoridad sin renunciar a la sofisticación.
El diseñador también es famoso por sus vestidos de fiesta elegantes, y sofisticados trajes de novias.
