Hoy con Cristo
PASTOR OSCAR AROCHA
«El que sacrifica alabanza me honrará.» (Salmos 50:23).
Honrar al Creador de manera activa es cuando nos entregamos de corazón a hacer lo que Dios manda para que sea magnificado y tenido en cuenta entre los hombres. En este sentido, las alabanzas o el reconocerle tanto en público como en privado son una forma de dar gloria. Las cosas en la creación manifiestan el poder y la deidad del Creador, pero nosotros como criaturas racionales podemos hacer más que eso.
Es honrarle cuando sujetamos nuestra voluntad a la suya, porque nuestras obras le glorifican más que nuestras palabras. Glorifícale, pues, en la posición que te ha colocado. Si eres pobre glorifícale siendo diligente, paciente, inocente y contento con tu estrechez. Si rico, glorifica a Dios con una mente humilde. Si sano, glorifícale con tu salud. Si enfermo, glorifícale por ser manso bajo su mano que te ha afligido. Si gobiernas a otros, mejora el celo de tu labor mejorando todas las ventajas de ese servicio. Si eres comerciante, glorifícale siendo justo en todos tus negocios, sin olvidar el dar a Dios lo que es de Dios y al César lo que es del César. Entiéndase que cada hombre ha sido enviado a este mundo para actuar la parte que el Gran Señor de la escena le ha puesto: «Que no defrauden a nadie, sino que demuestren toda buena fe para que en todo adornen la doctrina de Dios nuestro Salvador» (Tit.2:10). Por tanto, que en todo consideres el fin por el cual fuiste enviado aquí, y que un día tendrás que comparecer ante el tribunal de Dios: «¡Ojalá fueran sabios, que comprendieran esto, Y se dieran cuenta del final que les espera!» (Det. 32:29).
Quiera el Señor darnos Su bendición en esto y que al llegar al final de la jornada podamos decir como dijo el apóstol:»Porque nuestro motivo de gloria es este: el testimonio de nuestra conciencia de que nos hemos conducido en el mundo (y especialmente ante vosotros), con sencillez y la sinceridad que proviene de Dios, y no en sabiduría humana, sino en la gracia de Dios» (2 Co.1:12). Amén.