Dicen que no importa cómo se  comienza sino cómo se termina.

Pues si a eso vamos, el toletero dominicano Vladimir Guerrero debe ponerse las pilas para finalizar su campaña del 2010 con los Rangers de Texas de la misma manera que comenzó: caliente.

Guerrero fue uno de los jugadores más impresionantes antes del Juego de Estrellas, acabando con los lanzadores contrarios y repartiendo palos a diestra y siniestra, mientras llevaba a los Rangers a ocupar la primera posición de la División Oeste de la Liga Americana.

Guerrero tuvo un promedio de .319, con 20 jonrones y 75 remolcadas en la primera mitad de la campaña.

No obstante, las cosas no han ido del todo bien para Guerrero, quien se ha transformado en bateador designado luego de haber jugado toda su carrera como jardinero, primero con los Expos de Montreal y luego con los Angelinos de Los Angeles, equipo para el que militó hasta la pasada campaña.

En la segunda mitad, el cansancio parece haber comenzado a atacar a Guerrero, quien ha visto reducido considerablemente su poderío.

De hecho, desde el Juego de Estrellas, el Terror de Nizao solo ha sacado la bola del parque en una ocasión.

Al mismo tiempo, su promedio de bateo en la segunda fase de la campaña se ha desplomado hasta .232 y apenas ha impulsado un total de 11 carreras.

Globalmente, sin embargo, Guerrero tiene números mucho más que buenos, con un promedio de .301, 21 cuadrangulares y 86 remolcadas, cifras que lo mantienen entre los principales jugadores de la Liga Americana.

Guerrero todavía está a tiempo para volver a recargar baterías y seguir produciendo como lo hizo en la primera parte de la temporada o incluso aun mejor. Y de esa manera hacer valer un nuevo refrán que diga que importa cómo se comienza y también cómo se termina. 

Las cifras

.319 de promedio. Bateó Vladimir Guerrero en la primera mitad de la temporada, con 20 jonrones y 75 remolcadas.

.232 de promedio.  Ha registrado Guerrero en la segunda parte del año, con solo un vuelacerca y 11 impulsadas.