Esta semana quedó inaugurado el tan esperado torneo de béisbol de invierno dedicado a la memoria de Kalil Haché, y por varios motivos adelantamos que será histórico.
Primero, los fanáticos están ansiosos de volver al play tras un año de ausencia por la pandemia que aún existe, pero con más control y segundo, por ser el país sede de la Serie del Caribe 2022, lo que genera un mayor entusiasmo, y tercero, por la gran calidad de los planteles de los 6 equipos desde bien temprano.
A esto agregamos el 100 aniversario de uno de los equipos más tradicionales, Leones del Escogido, quienes tendrán muchas actividades conmemorativas y que los grandes rivales, Águilas y Licey, buscarán el liderato de títulos, ambos actualmente empatados con 22.
Pero no olvidemos que para ir al estadio hay que estar vacunado y que solo se permite un porcentaje de fanáticos que varía dependiendo de la ciudad, por lo que las boletas estarán más caras y escasas, sobre todo para los playoffs.
Debo resaltar al Banco de Reservas, entidad estatal que se ha convertido en el paño de lágrimas del torneo y el deporte en sentido general en una época tan difícil para el patrocinio.
El pasado miércoles salieron al terreno 6 campeones, pero solo uno lo será y buscará el título de la Serie del Caribe a disputarse en el Estadio Quisqueya Juan Marichal a partir del viernes 28 de enero.
Un premio muy merecido
Si juntamos la decencia, bondad y calidad deportiva nos saldrá como resultado Nelson Cruz. Una persona ejemplar dentro y fuera del terreno, orgullo del su comunidad y de todo el país.