Voracidad fiscal

Voracidad fiscal

Se ha dicho que el Presidente Fernández encabeza un gobierno que devora impuestos, que no le pone límites al gasto; la alusión puede demostrarse con  estadísticas tributarias comparadas. Mientras en siete años (1990-1996) el Presidente Balaguer maneja ingresos tributarios acumulados por RD$115 mil millones, un promedio anual de RD$17 mil millones, en cuatro años (1997-2000) el Presidente Fernández y el PLD lo superan, aumentan el promedio a RD$24 mil millones y el acumulado a RD$159 mil millones. Lo que hizo el PLD en los últimos cinco  años (2005-2009) no tiene precedente en la historia de las finanzas públicas de República Dominicana, tampoco de América Latina, aumenta a RD$201 mil millones los ingresos tributarios promedio anual y a un trillón de pesos el acumulado.

Comparemos la gerencia del PLD con la del PRD (2001-2004), que tuvo ingresos tributarios acumulados por RD$312 mil millones y un promedio anual de  RD$78 mil millones. El resultado es que en los últimos cinco años el Presidente Fernández y el gobierno del PLD aumentan en 158% los ingresos tributarios anuales. Ahí no paran las cosas, la enorme cantidad de recursos que manejaron fue insuficiente para pagar los gastos públicos, los corrientes, incluyendo el personal, promediaron 84%, es decir, con los impuestos institucionalizan el populismo para controlar elecciones.  Dicho de otra manera, un desastre ha sido la gerencia pública del PLD y el Presidente Fernández, de 2005 a 2009 acumuló un déficit en las finanzas de RD$103 mil millones, lo que contrasta enormemente con el déficit del gobierno 2001-2004 que apenas fue de RD$532 millones, no obstante la quiebra bancaria de los años 2003 y 2004.

El gobierno se apoya en un modelo agotado, para comprobarlo comparemos ingresos tributarios con crecimiento. Las estadísticas oficiales indican que en los años 2005-2009 se acumuló un crecimiento de 37.3%, cuando se relaciona con los ingresos tributarios acumulados se tiene que cada punto porcentual de crecimiento en impuesto costó a los dominicanos RD$27 mil millones de pesos. Si incluimos el déficit acumulado aumenta a RD$30 mil millones. Para el 2010 el costo de cada punto en crecimiento aumenta a RD$51 mil millones, porque el gobierno estima un crecimiento de 7%, ingresos tributarios por RD$286 mil millones y el déficit en RD$70 mil millones.

Otra manera de demostrar lo desastroso que resulta el modelo es mirando el crecimiento de la productividad del trabajador. A pesar de la quiebra bancaria, se duplicó en el periodo 2001-2004, como consecuencia el nivel de vida debió mejorar de manera paralela. De haberse continuado con el modelo por un largo trecho, que implicaba prudencia en el gasto público, control presupuestario y aumento de la productividad del trabajo, la mayoría de la población estaba destinada a  convertirse en clase media. Pero cuando se aplica una política de exceso de gastos, financiado con impuestos, endeudamientos masivos y atrasos en el pago, se reduce el crecimiento de la productividad del trabajo y los dominicanos vamos directo a la pobreza, excepto un grupito.

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