“Los logros de una organización son los resultados del esfuerzo combinado de cada individuo. Vince Lombardi”

Cuando se inició el presente campeonato sabíamos que no sería fácil y que se asumió más de un reto por la pandemia que estamos viviendo, agregado a la no presencia de público, la parte comercial, entre otra cosas.

El Covid 19 ha estado presente en cada rincón del planeta y el béisbol no iba a ser la excepción.

Los riesgos en donde jugadores, coches y hasta personal de oficina se exponían eran una realidad incuestionable.

La pandemia llegó a los equipos y con ella se activaron los protocolos de sanidad dispuestos por el Ministerio de Salud Pública y la Liga de Bésibol Profesional de la República Dominicana.

Los ejecutivos de los conjuntos con su rol realizan los esfuerzo necesarios para mitigar los efectos de la pandemia del Covid19.

Los técnicos de la liga han hecho hasta el momento un trabajo formidable, con las ausencias de los Gigantes del Cibao y Los Tigres del Licey por alrededor de 10 días y ni hablar de las suspensiones por las lluvias.

Han reprogramado las fechas y hasta las sedes para evitar que el torneo se estancara.
Si miramos la tabla de posiciones vemos que hay conjuntos que ya han jugado prácticamente la mitad de la serie regular, una vuelta que es de 30 encuentros.

Ello plantea la figura de las doble cartelera y que de seguro eliminará los días libres para los equipos que están quedando a deber en su accionar.

Otra solución sería extender la serie regular por lo menos 5 días más de lo planificado y contemplado en el calendario de juegos.

Con la vuelta a juego de los Tigres y Gigantes, los seis equipos que componen la Lidom exhiben un material de primera en donde no hay tiempo para no ganar.
La actual es una temporada muy pareja y los jugadores están entusiasmado para dar lo mejor de lo mejor.

Vamos todos a disfrutar del equipo de nuestra simpatia, cuidandonos todos.
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