POR MARIVELL CONTRERAS
Waddys Jáquez, el productor de la Ceremonia de Entrega de los Premios Casandra, es un individuo, actor y dramaturgo acostumbrado a luchar y a conseguir lo que quiere a base de sacrificios, trabajo y empecinamiento.

Tenemos la certeza de que estas cualidades han sido determinantes en el resultado final de un trabajo de largos meses y días de 28 horas en que ha defendido con uñas y dientes su propuesta artística y en que ha tenido que ceder por el peso de lo inevitable. Eso sí, sin amedrentarse y con una eterna carta bajo la manga –como el mejor mago de cualquier circo–.

Se han perdido elementos, personas y momentos que concibió como espectaculares (como ese de Aventura), pero no se perdió la idea central del evento.

Ha definido la ceremonia como “un canto de esperanza en el que resaltarán la belleza de la isla y la naturaleza”, dice que los y las artistas que actuarán mañana en la noche tienen una motivación común:

“No es por Acroarte o por Cervecería o por el Premio, sino por lo que significa cantarle a esta media isla del Caribe…”, que ha logrado tanto…

Es un canto a la esperanza, a la unión, a la expectativa de tiempos mejores que caracteriza a los dominicanos de este tiempo, para Waddys Jáquez, en su producción, “lo más importante es el mensaje”.

EN ARMONIA

Todas las partes han hecho su trabajo en armonía. Waddys quiso trabajar con su equipo, ya que tiene conciencia de que no es una buena decisión ir al play a jugar con los integrantes de un equipo ajeno.

Según sus palabras, Fernando Collado que es quien representa a Cervecería (además de Niní Cáffaro y el propio Rafael Menicucci) y la directiva de Acroarte con Feliz Vinicio Lora al frente “se han portado muy bien. Cada quien ha respetado el espacio del otro y me han dado toda la disponibilidad para realizar mi trabajo. Yo pensé que poderme involucrar iba a ser más difícil”.