Wall Street sigue sin rumbo y el Dow Jones cede un 0,02 % a media sesión

Wall Street sigue sin rumbo y el Dow Jones cede un 0,02 % a media sesión

Nueva York. Wall Street seguía hoy sin un rumbo claro y hacia la media sesión el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, retrocedía un leve 0,02 % pendientes de la cotización del petróleo.   Ese índice bajaba a esta hora 3,77 puntos hasta 17.788,98 unidades, el selectivo S&P 500 restaba un 0,07 % hasta 2.071,42 enteros y el índice compuesto del mercado Nasdaq se dejaba un 0,02 % hasta 4.913,38 unidades.   Hacia el ecuador de la jornada, los operadores en el parqué neoyorquino seguían sin encontrar un rumbo claro y se decantaban por las ventas moderadas pendientes de la cotización del precio del petróleo en los mercados internacionales.

A esta hora el barril de Texas, de referencia en el país, bajaba un 1,39 % y cotizaba en Nueva York a 36,28 dólares, mientras que el crudo Brent, de referencia en Europa y otros mercados, caía en Londres un 1,42 % y cotizaba a 38,12 dólares.

La mayoría de los sectores continuaban en negativo, entre los que destacaban el de materias primas (-0,89 %), el industrial (-0,43 %), el financiero (-0,34 %) o el energético (-0,12 %), mientras que solo avanzaban el sanitario (1,31 %) y el tecnológico (0,04 %).   Nike (-2,74 %) lideraba las pérdidas en el Dow Jones, por delante de General Electric (-1,94 %), Cisco Systems (-1,04 %), JPMorgan Chase (-0,99 %), Goldman Sachs (-0,81 %), Intel (-0,83 %), Johnson & Johnson (-0,69 %), Caterpillar (-0,66 %) y Chevron (-0,54 %).

Al otro lado de la tabla encabezaba los avances Pfizer (2,08 %) por delante de Merck (1,64 %), Apple (1,59 %), Visa (0,66 %), Boeing (0,61 %), IBM (0,58 %), McDonald’s (0,57 %), United Technologies (0,52 %) y Verizon (0,41 %).

Fuera de ese índice, Virgin American se disparaba más de un 42 % en el mercado Nasdaq tras confirmarse que cerró un acuerdo de venta por unos 2.600 millones con Alaska Airlines, cuyas acciones bajaban un 4,99 % en la Bolsa de Nueva York (NYSE).   En otros mercados, el oro bajaba a 1.217,6 dólares la onza, la rentabilidad de la deuda pública a diez años retrocedía al 1,770 % y el dólar perdía terreno frente al euro, que se cambiaba a 1,1394 dólares.