Washington de Peña – Paula

Washington de Peña – Paula

Apenas abre a la vida. Se marchó la puerilidad con la pubertad para dar paso a una lozana adolescencia. Ahora los sueños tienen otros colores. Son distintos los sonidos. Las ambiciones se centran en la carrera universitaria. Un novio. Un carro nuevo. La discoteca. Los viajes al exterior. Conocer el mundo. Trabajar y entonces, casarse y procrear familia. Le sonríe la vida. Todo lo tiene al alcance de la mano y pedir de boca.

Su posición social le augura todo esto y mucho más.

De repente, la vida la convierte en un símbolo.

Nada más y nada menos que en símbolo de la juventud dominicana.

Es que Paula es hija de Eduardo Estrella y este es candidato presidencial del Partido Reformista Social Cristiano y el último día de enero de este año, la llevó con su madre, a que le acompañara en una actividad que la juventud de su partido le dedicara. Eduardo ha de pronunciar un discurso.

La tribuna, atiborrada de cofrades, mira hacia el legendario Río Ozama, el mismo que arrullara la juventud de Juan Pablo Duarte y sus jóvenes amigos creadores de la patria. La brisa, cargada de esas aguas, combinación de río y de mar, como en aquella ocasión, moja el pelo al vuelo, de los arrebolados jóvenes asistentes a la actividad pública, que se desplazan al ritmo de la música con el entusiasmo que solo genera esa edad y un motivo.

Llega al turno del discurso y Eduardo, generalmente parco, ensancha el pecho, yergue la frente, mueve las manos en tórridos ademanes y levanta la voz para empezar a hablar ante tantos jóvenes que claman por un mensaje de alivio al sufrir de su época.

Eduardo lee el mensaje y su cuerpo completo lo recoge. Se estremece.

La adrenalina fluye a torrentes por su caudal sanguíneo. Su mirada, vagando sobre el mar de cabezas, no reconoce a nadie. Piensa al tiempo que habla. Pronto, las aguas del Ozama le estremecen y logra conjugar exactamente la emoción sin compases de las últimas cuatro horas, mientras participaba en un gigantesco desfile en honor de su candidatura, remedo del recuerdo de su mentor y guía Joaquín Balaguer. Ido en cuerpo y presente en alma.

Distinto a su costumbre, las palabras salen de sus labios con fluidez inusitada. Las frases hacen dúo con el murmullo que acompaña a la multitud que le aclama y pide futuro. Entonces es cuando por primera vez en el curso de su campaña electoral dice directo «la juventud que sepa, que cuando yo gobierne, ellos estarán en la primera fila y en los mejores asientos».

Aquí, en ese instante, fue cuando pareció que el rostro se le llenó de Luz. Brillaba cual si lo besara el sol y era de noche. Hablo de los niños y de los niños que pasarán de niños a jóvenes y que a su día se convertirán en ciudadanos, poderosos ciudadanos que con su primer voto cambiarán el panorama político nacional. Evidentemente, Eduardo Estrella, candidato presidencial del PRSC, hablaba de futuro, del futuro de la nación. Del futuro de su Patria la República Dominicana. De trabajo. De progreso. De dignidad y decoro. De honradez y entonces, en un raptus de encomio, señaló a su hija Paula.

Adolescente de primera cédula la llamó. Votante de primera vez le dijo y a seguidas como si levitara su cuerpo en la tribuna, su voz pareció transformase en manto protector de todos los jóvenes presentes, mientras Eduardo juraba lleno de ternura paternal y fiereza patria, que con la juventud dominicana, sucedería como para con su hija Paula, a quien nunca había dicho una mentira.

El rostro de la niña se hizo luz.

Su vestido grana, ajado por las horas del combate acabado de ocurrir, ocultar no pudo el latir de su pecho.

Ella no lo sabe. Pero desde ese instante es un símbolo que señalará a su padre si flaqueara en cualesquiera de las circunstancias que se presenten.

Es que la juventud es vida que desprecia la muerte. Es que la juventud es avance machacador de obstáculos. Es que la juventud es meta por si misma, la que alcanzan los niños que crecen y se convierten en maestros de la vida.

Es que la juventud es fuerza. La verdad de la vida.

Paula, Paula, ¡qué compromiso!

Publicaciones Relacionadas

Más leídas