MONTEVIDEO, (AFP) – La diplomacia estadounidense veía al ex presidente uruguayo Tabaré Vázquez, el primero de izquierda en el país, como un «estadista capaz y moderado» aunque consideraba a su canciller «intratable» y «antinorteamericano», según cables filtrados por WikiLeaks publicados el viernes por el diario uruguayo El País.
En un despacho de marzo de 2006 enviado al Departamento de Estado, el embajador interino en Uruguay, James Nealon, opina que Vázquez «es un estadista capaz y moderado».
El cable filtrado por WikiLeaks indica que en un encuentro con el entonces presidente, éste «explícitamente afirmó que quería un Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos», aunque reconoció que el proceso sería difícil porque todavía había dentro el gobierno «algunas personas que se quedaron en el pasado».
Durante su presidencia, Vázquez impulsó la firma de un TLC con Estados Unidos, pero ante las resistencias en el seno del gobierno y presiones en el Mercosur -que Uruguay integra junto a Argentina, Brasil, Paraguay y Venezuela- Uruguay y Estados Unidos se limitaron a firmar en 2007 un Acuerdo Marco de Comercio e Inversiones (TIFA, por su sigla en inglés).
En otro cable, en el que analiza el primer año de gobierno de Vázquez (2005-2010), Nealon indica que «es claro que el liderazgo hábil y pragmático de Vázquez (…) ha prevenido la inclinación radical que algunos observadores habían predecido durante la campaña electoral de 2004».
Agrega que Vázquez logró «aplacar» a muchos «radicales» de izquierda y opina que «como oncólogo, el doctor Vázquez dirige el país como un médico trata a sus pacientes y con una precisa habilidad quirúrgica».
A juicio del diplomático, Vázquez parecía seguir «más el ejemplo del ex presidente chileno Ricardo Lagos, y su estilo afable de liderazgo contrasta fuertemente con el de Hugo Chávez, Néstor Kirchner y Evo Morales».
Añadió que el uruguayo parecía «ejercer una influencia moderadora en Chávez, y podría actuar de la misma manera sobre Evo Morales».
En cambio, la embajada de Estados Unidos en Montevideo celebró la partida, en 2008 del entonces ministro de Relaciones Exteriores Reinaldo Gargano, luego de tres años en el cargo.
«La Embajada está encantada de haberse liberado del intratable Gargano, quien consistentemente buscó minar las relaciones con EE.UU», sostiene uno de los cables. Los diplomáticos consideraban a Gargano «antinorteamericano», «ideológicamente terco», un «fuerte defensor de estrechar lazos con Cuba» y «uno de los elementos más radicales de la coalición» de gobierno.
Consultado por el sitio Observa, el ex canciller calificó los cables de Wikileaks como «un error», «producto de una actitud dogmática».