POR MARÍA MERCEDES
Una inmensa alegría se posó en el corazón de quienes asistieron a la inauguración de la XXXIII exposición realizada por el Jardín Botánico Nacional, Doctor Rafael María Moscoso Puello y la Sociedad Dominicana de Orquideología, Inc.

De esta manera, como cada año, el domus principal del Jardín Botánico vio llegar a muchos amantes de estas plantas, quienes además participaron en el XXIII Concurso de Orquídeas 2005.

Jorge Paniagua, presidente de la Sociedad Dominicana de Orquideología, dijo que esa muestra tiene como finalidad difundir el estudio y cultivo de las orquídeas en el país, así como investigar y promover las orquídeas nativas y endémicas para contribuir con su preservación.

En esta exótica exposición, los visitantes pudieron apreciar y adquirir una gran variedad de estas plantas.

Conjuntamente con la muestra, fueron impartidas charlas sobre el cultivo y cuidado de estas flores.

También en el concurso, patrocinado por la Secretaría de Turismo, fueron premiados los pabellones que tuvieron la más rica variedad de orquídeas, las más exóticas y las nativas y endémicas.

La bendición fue realizada por el sacerdote Héctor Sánchez, quien expresó que esas plantas transmiten y comunican esa belleza que sólo Dios puede dar. «Esta exhibición es un homenaje al papa Juan Pablo II, quien supo comunicar la belleza que los hombres y las mujeres llevan en su interior».