El Partido Reformista Social Cristiano (PRSC)  tuvo una dilatada trayectoria en la política nacional, especialmente desde que el 1º de junio de 1966 ganara las elecciones presidenciales. Se mantuvo en el poder hasta el año 1978 y, desde las elecciones municipales del año 1968 controló la gran mayoría de los ayuntamientos. Ejerció un poder cuasi dictatorial mientras su líder, Joaquín Antonio Balaguer, detentó la presidencia de la República.

Con los años, el PRSC fue amasando una fortuna en locales y medios materiales. El mantenimiento de una  maquinaria electoral nacional así lo requería, aunque fuera para activarla solo en los periodos de campaña.

Una vez fuera de la presidencia en el año 1996, la deserción de las filas del PRSC ha sido constante. Su  votación en progresiva mengua, año tras año, así lo demuestra. En los últimos comicios apenas obtuvo 4% de los votos.

Los aportes financieros del Estado, deben haberle permitido al PRSC mantener sus locales y muchos de sus medios materiales.

El caso es que, hoy día, el tamaño del partido no se corresponde con lo que posiblemente sea el monto de su patrimonio material.

Es algo que debe dilucidarse en público, darse a conocer. Porque es una entidad que por años ha sido objeto de financiamiento público.

Es preciso que se informe la cantidad de dinero, inmuebles, vehículos, mobiliario, dinero en efectivo, que posee el partido del gallo colorado. Y quiénes controlan esos bienes.

Federico Antún Batlle acaba de renunciar a la presidencia del partido y éste se apresta a elegir nueva directiva. El momento es oportuno para poner en claro todo esto.