La Procuraduría General de la República depositó una ofrenda floral en el Altar de la Patria, por motivo de la celebración del Mes de la Patria y en expresión del compromiso institucional de preservar los valores que motivaron a los propulsores de la independencia nacional.
La entrega floral estuvo encabezada por el magistrado Rodolfo Espiñeyra Ceballos, primer sustituto de la procuradora general de la República, quien estuvo acompañado de la directora general de Persecución, Yeni Berenice Reynoso; del titular de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca), Wilson Camacho, entre otros procuradores adjuntos, funcionarios y servidores.
En el acto protocolar, el magistrado Espiñeyra Ceballos destacó el compromiso del Ministerio Público de garantizar los derechos fundamentales de la ciudadanía y de trabajar en beneficio del interés de la sociedad dominicana.
“En ocasión de la celebración del Mes de la Patria, que se inició con la fecha del natalicio del Padre de la Patria, Juan Pablo Duarte, y culminará el próximo 27 de febrero, con un nuevo aniversario de la Independencia, esta representación de las mujeres y los hombres del Ministerio Público, que encabeza la magistrada Miriam Germán Brito, vienen a este mausoleo a ratificar su compromiso de ser la institución del sistema de justicia que garantizará los derechos fundamentales de las personas y la persecución penal en la acción pública, siempre en interés de la sociedad dominicana”, puntualizó el magistrado Espiñeyra Ceballos.
El primer sustituto de la procuradora general de la República puntualizó que los principios que soportan la justa y oportuna impartición de justicia estaban presentes en los ideales del patricio Juan Pablo Duarte, a quien honró con la lectura de un fragmento de la carta que el líder trinitario le escribió a Félix María del Monte.
“El buen dominicano tiene hambre y sed de justicia ha largo tiempo, y si el mundo se la negase, Dios, que es la Suma Bondad, sabrá hacérsela cumplida y no muy dilatado; y entonces, ¡ay de los que tuvieron oídos para oír y no oyeron, de los que tuvieron ojos para ver y no vieron la eternidad de nuestra idea, porque ellos habrán de oír y habrán de ver entonces lo que no hubieran querido oír ni ver jamás!”.
La comitiva de la Procuraduría General de la República y del Ministerio Público concluyó dando gracias a los fundadores de la República y al grito de: “¡Qué viva la República Dominicana!”.