San Francisco de Macorís.
Yissel Infante Brito, sino la más, es una de las mujeres con más alta responsabilidad en el béisbol invernal dominicano.

Su cargo, Gerente Administrativa de los Gigantes del Cibao.
“El hecho de que se me haya asignado un cargo de tanta responsabilidad es la mejor muestra de que aquí se cree en la capacidad de la mujer”, reconoce Infante Brito.

Explica que lleva 14 años laborando en el grupo Rizek y que fue responsabilizada de la parte administrativa de los Gigantes a partir del momento en que el grupo empresarial adquirió el equipo.
“Te confieso que no sabía nada de deportes, incluso, por la sección que menos me interesaba en los periódicos es la de deportes”, dice.

“Sin embargo, esa realidad ha cambiado por completo. Ahora soy más deportista que cualquiera”, agrega.

Estadio ha sido transformado. Asegura que en los últimos dos años, el estadio Julián Javier, hogar de los Toros del Este, ha sufrido una transformación de casi un 90 por ciento.

“Somos el único estadio del país con un gimnasio e sus camerinos, el terreno de juego se encuentra en excelentes condiciones y el trabajo que se le hizo fue avalado por la Major League Baseball (MLB), fue remoldado el palco de prensa, contamos con un moderno palco presidencial para los accionistas y sus invitados”, sostiene.

Destaca las condiciones de los clubhouses, tanto el de los locales como el de los visitantes.
Agrega que también se trabajó en la reconstrucción de los baños y que hay un mantenimiento constante para garantizar que todo esté en orden, siempre pensando en el confort de los fanáticos. Muestra, además, su agradecimiento al fanático, por el respaldo al equipo, así como el de los patrocinadores, “quienes han creído en nuestro trabajo”.

Destaca, asimismo, las buenas relaciones con los peloteros y su adecuado comportamiento.
Planes. Refiere que hay planes de seguir trabajando en la modernización del estadio, que incluye la amplicación de su capacidad.

“Aspiramos a que su capacidad sea ampliada de poco más de siete mil a 16 mil fanáticos”, concluyó Infante Brito.