Lourdes Penélope Pérez, la mujer que agredió a su hija de nueve años con un arma blanca, causando graves lesiones al arrancarle el cuero cabelludo, ha declarado que no tenía la intención de lastimar a la niña.
Pérez, quien fue arrestada en Puerto Plata después de huir del lugar del incidente en la provincia Espaillat, aseguró que el ataque fue un desafortunado accidente.
En sus declaraciones tras el arresto, confesó que el acto se le “fue la mano”. La acusada explicó que su intención original no era agredir a su hija, sino simplemente cortarle el cabello.
“Pido perdón a la sociedad, yo no lo quería hacer, se me fue la mano, no fue para agredirla, era para cortarle el pelo,” afirmó.
La detenida está acusada de violar los artículos 309-2-3, literales B y E del Código Penal, modificados por la Ley 24-97, así como los artículos 396, literales A y B de la Ley 136-03 (Código para la Protección y los Derechos Fundamentales de los Niños, Niñas y Adolescentes), y el artículo 303 del Código Penal Dominicano, en relación con tortura y barbarie.