Justo a las 10:15 de la noche sube al escenario Yordano, músico y compositor italo-venezolano, para compartir con sus fieles seguidores el repertorio de sus éxitos en su carrera artística, el pasado miércoles en Hard Rock Café, Blue Mall.
Se encienden las luces y el cantautor con una sonrisa sincera agradece al público por la asistencia al evento y da la bienvenida a todos los asistentes con el pop “A la hora que sea”. Más adelante, con voz entrecortada saluda a su público. “Buenas noches, gracias por tanto”. Le reciben desde sus asientos con aplausos y vítores. “¡Arriba Yordano!, vociferaron varias veces.
Sentado en un banco con ropa bohemia; sombrero y saco, continúa su show “El tren de los regresos”. Dado su nombre, se retornó a los años 80 y 90, época en la que el cantante empezó a encaminarse en el oficio del arte del canto.
Con más de seis años sin presentarse en escenarios dominicanos, el artista conmovió mucho a algunos de sus admiradores por sus interpretaciones durante el evento, pese a problemas a la hora de cantar y hablar, pues en algunas ocasiones no se comprendía lo que emitía a través del micrófono.
¡No se escucha!, gritaban con desesperación algunos. Más tarde aumentaron el volumen por sus peticiones y se comprendía un poco mejor. Giordano Di Marzo, nombre de pila del cantante, se disculpó por ese rato inesperado. “Se me va la voz, lo lamento”, dijo y muchos le apoyaron con gran algarabía.
En este concierto de unas dos horas aproximadamente, Yordano celebró con los temas “Vivir en Caracas”, “Hoy vamos a salir”, “Muñeca de lujo”, “Chatarra de amor”, “Lejos”, “Una vez más”, “Que sería de mí”, “Triste historia”, “Media luna”, “Todo el amor”, “Manifiesto”, “Si me preguntaran”, “No queda nada”, “Perla negra”, “Bailando tan cerca”, “Otra madrugada”, “Querida”, “Aquel lugar secreto”, “Manantial de corazón”, “Por estas calles”, “Madera fina”, “Otra cara bonita” y “Locos de amor”. Con esta última melodía se proyectó un audiovisual de diferentes etapas de su vida con su esposa Yuri Bastidas, como en el que contrajo nupcias y en la difícil situación cuando batallaba con el cáncer de médula ósea.