kelvin pascual
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El Premio Nobel de la Paz Muhamand Yunus entiende que prestarle dinero a las mujeres resulta más beneficioso para las familias, ya que estas gastan de una manera distinta, debido a que son muy precavidas, por lo que desde que creó en Bangladés Grameen Bank, un banco para los pobres, su intención fue hacer una igualdad en los microcréditos.
Al dictar la conferencia “Erradicando la pobreza mundial, un préstamo a la vez”, en el marco de la segunda exposición comercial HUB Cámara de Comercio Santo Domingo, el economista dijo que las mujeres siempre quieren hacer el mejor uso posible del dinero y tomar la mejor ventaja de este.
“El hombre por naturaleza es muy centrado, mientras que la mujer quiere compartir cosas con sus hijos, la familia, quieren ver resultados a largo plazo. El hombre quiere disfrutar el dinero en el momento”, señaló Yunus.
Recordó que después de analizar la participación de las mujeres en los créditos bancarios, decidió olvidar el 50% para las mujeres y enfocarse en ellas, por lo que el 90% de los préstamos que se realizan en Grameen Bank van destinados a mujeres pobres.
Contó que en principio las mujeres se negaban a que les prestaran dinero, por lo que le tomó seis años lograr un equilibrio entre los prestatarios.
“Las mujeres decían no, yo no he tocado dinero en mi vida. ¿Cómo voy a utilizar este dinero si yo no sé manejarlo?”, explicó Yunus.
Recordó que con ayuda de sus estudiantes de la universidad, fueron insistentes con las mujeres que se negaban a tomar el dinero, pero que luego de años pudieron sacar el pánico de las mujeres.
Microcrédito a los pobres. En su disertación, Muhamand Yunus recordó que los abusos que cometían los usureros con las personas de una ciudad pobre de Bangladés fue lo que motivó a hacer algo para contrarrestar ese problema, por lo que se le ocurrió prestarles dinero, acción con la que empieza su popularidad en los microcréditos.
Dijo que inmediatamente comenzó a prestar dinero su personalidad se hizo muy popular, ya que todo el mundo quería que le prestaran y la acción se transmitió a otras ciudades.
Contó que con la labor se sentía satisfecho, porque veía que ayudaba a las personas y evitaba que estas volvieran a los usureros, pero que con el auge que tomaron sus préstamos tuvo que pensar en una manera de que esto no desapareciera, por lo que decidió crear un banco para los pobres, el Grameen Bank.
Señaló que cuando fue donde el ministro de Finanzas de su país, este le cuestionó su intención de crear un banco para las personas pobres, a lo que él le respondió que no había nada malo en esa intención.
Dijo que el funcionario le explicó que los pobres no iban a devolver el dinero que se les prestaba, pero él confiaba en ellos, porque pagarían mejor que los ricos.
“Me tomó tres años de manera continua explicando a los políticos que se necesitaba en Bangladés una institución bancaria como esta y la gente se reía en mi cara. Los banqueros estaban en contra”, detalló.
Yunus manifestó que hoy en día el microcrédito es un fenómeno global y que hay otros países interesados en imitarlos.