El presidente de la Asociación de Empresas de Zonas Francas, Luis José Bonilla Bojos, expresó hoy su preocupación por la nueva disposición de la Dirección General de Impuestos Internos (DGII), en la que aplicará el Impuesto sobre la Renta a las utilidades pagadas por parte de las empresas de zonas francas a sus accionistas.
Bonilla Bojos manifestó que la esencia de este sector para la atracción de inversiones son las exenciones en el sistema impositivo aplicables a las empresas que se encuentran bajo este régimen, que le permiten poder tener menores costos de producción.
“El esquema de las zonas francas goza de ciertos beneficios tributarios, que son los que básicamente hacen que sea posible nuestro nivel de competitividad en mercados internacionales”, dijo.
Agregó que mientras más incentivos sean eliminados al sector, menos probabilidades habrán de continuar con el crecimiento que hemos llevado en los últimos años, en exportaciones, generación de divisas, empleos formales y diversificación de empresas.
Expresó, además, que esta nueva medida contradice la estrategia del gobierno, de que las zonas francas continúen siendo la plataforma modelo para la inserción competitiva del país en el comercio internacional y permita seguir
siendo uno de los mayores sectores productivos nacionales de generación de empleos y desarrollo económico.
La DGII ha impuesto esta disposición en base a la Ley 253-13 sobre el Fortalecimiento de la Capacidad Recaudatoria del Estado para la Sostenibilidad Fiscal y el Desarrollo Sostenible, la cual no va alineada a lo establecido en la Ley 8-90 sobre Fomento de las Zonas Francas.