POR ALEIDA PLASENCIA
Se vislumbra que en el país se producirá un impacto negativo a partir de enero del 2005 en la industria de la confección y una reducción de empleos en ese segmento de zona franca, según el presidente de la Asociación Dominicana de Zonas Francas (ADOZONA).

Arturo Peguero dijo que eso es indiscutible, ya que el futuro de las zonas francas del país radica ahora en la proliferación de empresas diversificadas. No obstante, consideró que hay que tratar de lograr el menor impacto posible en los textiles, a los fines de evitar el desempleo en ese renglón.

Según Peguero, la gran mayoría de las empresas de zona franca que se están preparando para iniciar operaciones en el 2005 no son del ramo textil y fábricas de mayor valor agregado que las que se instalaban antes, cuya mano de obra es de alta calificación.

Explicó se trata de empresas que requieren manos de obra bien tecnificadas y que por tanto generan menos empleos que las del ramo textil.

Señaló que eso es muy positivo para el país, ya que se trata de empresas de mayor valor agregado, las cuales se dedican a actividades productivas no tradicionales, que producirán mayores recursos económicos a través de emplear mano de obra de mayor nivel.

Expresó que las 113 nuevas empresas que fueron aprobadas este año para iniciar operaciones próximamente, generarían sólo unos 16,000 empleos.

Se trata de una cantidad menor a la que generarían estas empresas si fueran textiles. Las del ramo textil generan aproximadamente 500 empleos por empresa indicó.

Las zonas francas el pasado año tenían 175,000 empleos y actualmente alrededor de 185,000, dijo.

Para el 2005, manifestó Peguero, se vislumbra que todas las empresas no textiles, tanto las que ya operan como las que se encuentran en proceso de instalación, van a tener un desarrollo importante, si se aprueba el Tratado de Libre Comercio con los Estados Unidos.