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La tensión se elevó ayer en Gualey cuando 14 jóvenes de esa barriada fueron arrestados por agentes de la Policía Nacional mientras exigían que los trasladaran a un lugar lejos de donde la Oficina Para el Reordenamiento del Transporte (Opret) construirá el puente por donde cruzará a Santo Domingo Este la segunda línea del Metro.
Los manifestantes condenaron que la Opret indemnizara a 29 familias y algunos inquilinos y dejara en el peligro a más de 60, donde hay niños que luego del desplome de un canasto de acero, el 21 de mayo, temen salir de sus hogares. El apresamiento se produjo mientras una comisión dialogaba con Leonel Carrasco, subdirector de la Opret, en su despacho.
Hasta Tomás Aquino Pérez, vocero de los moradores del entorno de donde se levanta la estructura para el Metro, fue maltratado, a pesar de que es discapacitado, cuando exigía la libertad de los detenidos. Mientras, la Opret cerraba el paso a decenas de familias de Ribera del Ozama, ya que por donde estos transitan el organismo levantará las grandes columnas para el puente por donde cruzará el Metro a Santo Domingo Este.
