Los inversores que en los últimos años lo compraban todo en el mercado de deuda basura han empezado a moverse en otra dirección ante el primer indicio de problemas.
El desplazamiento ha tomado desprevenidos a los mayores bancos de Wall Street y los deja cada vez más ante la financiación de adquisiciones en las que los inversores no están interesados. Bank of America Corp. y Morgan Stanley se vieron obligados el martes a archivar el paquete de deuda que respaldaba la compra apalancada más grande del año: US$5.500 millones destinados a financiar la compra por parte de Carlyle Group LP de Veritas, el negocio de almacenamiento de datos de Symantec Corp., según dos personas familiarizadas con el tema.
“Es un mercado muy fluctuante”, dijo Martin Fridson, máximo responsable de inversión de Lehmann Livian Fridson Advisors LLC. “Ya al margen de un período de recesión, esto ha sido muy brutal”.
Los inversores en renta fija se apresuran a cerrar la puerta a los negocios de mayor riesgo conforme se preparan para un aumento de la tasa de referencia de la Reserva Federal de los Estados Unidos por primera vez en casi una década y se oscurecen las perspectivas de crecimiento global.
Eso ha dejado a los bancos con más de US$15.000 millones de transacciones que las firmas administradoras de dinero han rechazado o por cuya compra han exigido enormes descuentos en las últimas semanas. Los inversores también podrían llevar a esos bancos a pensarlo dos veces antes de cerrar negocios con elevado apalancamiento en el futuro.
Bank of America y Morgan Stanley realizaron importantes revisiones de los términos de la oferta de Veritas a los efectos de atraer inversores, según las personas, que pidieron que no se revelara su identidad porque la información no es pública. No funcionó, lo que llevó a los bancos a postergar la oferta con la esperanza de relanzarla cuando las condiciones del mercado sean más favorables, dijeron las personas.
Un inversor dijo que en la última semana lo había contactado tres veces un vendedor de crédito que le preguntó qué descuento necesitaba para aceptar la transacción. Ofrecer la deuda con grandes descuentos puede afectar las comisiones de suscripción y, de ser muy grandes, puede generar pérdidas para los bancos.
‘Muy atento’ “Symantec sigue esperando que la venta de Veritas se concrete para el 1° de enero, como se había anunciado”, dijo Noah Edwardsen, un vocero de Symantec. “La concreción no depende del financiamiento”.
Representantes de Bank of America y Carlyle se negaron a hacer declaraciones.
Colm Kelleher, que dirige las negociaciones y la banca de inversión de Morgan Stanley, dijo que en una reunión de inversores que está “concentrado en las finanzas apalancadas” y que la venta de las ofertas de deuda con problemas lo lleva a estar “muy atento”. Un representante de Morgan Stanley se negó a hacer declaraciones sobre la transacción de Veritas.
Barclays Plc, Citigroup Inc., Credit Suisse Group AG, Goldman Sachs Group Inc., Jefferies Group LLC y UBS Group AG son los otros bancos que participaron en la deuda, según datos que recopiló Bloomberg.
Los bancos necesitan vender los préstamos para fin de año a los efectos de reducir la tenencia de activos de riesgo que se usarán para la prueba de resistencia del año próximo, según Brian Kleinhanzl, un analista de Keefe, Bruyette Woods Inc.
“La Fed puede fijar tasas de mayores pérdidas sobre esos préstamos, lo que significa que el retorno del capital de los bancos podría verse afectado”, dijo Kleinhanzl.
El precio promedio de los préstamos apalancados en el mercado secundario ha caído por debajo de los 90 centavos por dólar, el nivel más bajo en cuatro años.
Los inversores dan claras muestras de sus preferencias en bonos de alto rendimiento y se desplazan hacia los niveles más altos de solvencia, al tiempo que abandonan las ofertas de menor calificación.