Los profesionales y jóvenes haitianos que estudian en universidades dominicanas deben retornar a su país tan pronto terminen sus carreras para contribuir con los conocimientos adquiridos a su desarrollo, declaró Miousemine Celestin, encargada de negocios de la embajada de Haití en República Dominicana.
Ofreció las declaraciones al participar en un ciclo de conferencias sobre “Juventud y emprendimiento”, auspiciado en Santiago y Santo Domingo por la organización Salvando a Haití (Napsa), por sus siglas en creole, para apoyar una mejor adaptación y desarrollo de sus inmigrantes en el país.
Las conferencias fueron coordinadas por Lully Charles, del departamento de Educación de Napsa, a Santo Domingo y Santiago; y por Enrique Joachim y Dimitry Rodger, coordinadores de Napsa en Santiago y Santo Domingo, respectivamente.
En la actividad también disertó el empresario haitiano-estadounidense Johnson Napoleón, quien refirió que “en República Dominicana no existen solamente compatriotas pidiendo limosnas en las calles ni tampoco cañeros en los bateyes”, sino que miles de sus compatriotas son estudiantes y profesionales.
Napoleón refirió que debió superar experiencias dolorosas para hacerse un nombre en Estados Unidos, principalmente a través del Azure College, que fundó en Miami. Asimismo, se refirió al comportamiento que se debe adoptar y las técnicas a dominar para tener éxito en los negocios como migrantes, “que como tales en términos generales, tenemos que enfrentar las experiencias más decepcionantes”. En la actividad participaron también el sacerdote anglicano Edwin Paraison, director ejecutivo de la Fundación Zile; y jóvenes empresarios como los ingenieros Caribert Toussaint, presidente fundador de CW Supli-Pharma Expreso; Franchena Charles, propietario de la marca Reality Hair Growth, y Gregor Rémy, presidente fundador de la industria Patson.
Además Michel Millery, Shter Falie, Thalita Jules Nke, E. Wood, Afline Pedro, Laura Corvington, Jeff H. Peña, entre otros.