El día consagrado a las madres llega esta vez en una etapa en que la violencia intrafamiliar y la pérdida de cohesión de la familia alcanzan niveles altamente preocupantes. Llega en una etapa de la humanidad en que las drogas y la delincuencia que las mismas generan sustraen a los hijos del seno familiar, constituyéndose en uno de los dolores más mortificantes para las madres dominicanas.
Se conmemora este día en una época en que aún no ha materializado la promesa de los políticos de reivindicar el valor y la importancia de la mujer a través de una distribución equitativa de las oportunidades y posiciones en la administración del Estado, y cuando prevalece aún el trato diferenciado respecto al hombre, en términos de remuneración y reconocimiento de méritos.
La conmemoración del Día de las Madres coincide también con una etapa en que se constituye en un trastorno social el hecho de que es cada vez más alto el número de adolescentes embarazadas, que traen al mundo crías sin estar preparadas para afrontar la maternidad con la responsabilidad y dedicación que requiere. Nos llega ese día en momentos en que en las estadísticas sobre crímenes se consignan cifras alarmantes de feminicidios y maltratos contra la pareja por arranques de machismo irracional. Valdría la pena trabajar con ahínco para cambiar el panorama que aqueja a las madres en estos tiempos.
¿Cuánto cuesta Cogentrix?
El Estado dominicano paga sumas enormes por no recibir energía eléctrica de la planta Cogentrix. La razón es que el altísimo consumo de gasoil de esa planta hace que el costo del kilovatio hora sea muy alto. Para hacerle frente a eso, el Estado decidió convertir esa planta a gas natural, lo que bajaría significativamente los costos de generación y, por tanto, el precio de la energía.
Sin embargo, ha pasado el tiempo y nada se hace por realizar esa conversión. Nadie explica por qué no se apresura el proceso para aprovechar esta planta que resulta tan onerosa cuando opera con gasoil. Se prefiere pagar por mantener la planta apagada, entes que convertirla a gas natural y ponerla a generar a costos más bajos. No sabemos cuál es el argumento para pretender justificar lo que está ocurriendo, pero lo cierto es que nada justifica que paguemos tan caro por mantener una planta apagada. Sería buen ejercicio calcular por cuánto nos está saliendo Cogentrix.